El arzobispo de Zaragoza apuesta por que "en medio de la confusión" haya "una narración humana"
ZARAGOZA, 12 (EUROPA PRESS)
El fotoperiodista Gervasio Sánchez ha sostenido que, en la guerra, "lo difícil es encontrar inocentes" porque las personas, "cuando todo se desmorona, nos convertimos en auténticos seres vandálicos, de rapiña". "He conocido en la guerra pocas personas que prefiera morir antes que matar", ha sintetizado.
Así lo ha manifestado en declaraciones a los medios de comunicación, antes de recoger el premio 'Comunicar con valores', en su IV edición, que concede el Arzobispado de Zaragoza, y que ha hecho también una mención especial a título póstumo a la periodista de RTVE Alicia Gómez Montano.
"Las personas me han dado muchísimos malos sabores de boca", ha reconocido el fotoperiodista, que ha remarcado que "no solamente son culpables los que matan, sino los que señalan a quién hay que matar, los que de alguna forma aplauden o jalean a los que matan y los que miran hacia otro lado".
Frente a este situación, ha explicado que en los numerosos conflictos armados que ha cubierto por todo el mundo ha tratado de "buscar historia personalizadas de quienes se han comportado decentemente o que por su edad no eran culpables porque eran demasiado pequeños".
Esto, ha dicho, "me hace equilibrar ni balanza anímica, me permite evitar tener que ir al psicólogo y al psiquiatra para decir que ya no confío en el ser humano" y "me permite salvaguardar mi propia conciencia", ha sostenido.
10.000 AÑOS DE GUERRA
El fotoperiodista ha esgrimido que "no hay ni día en la historia sin guerras" y estas existen "desde hace 10.000 años", como lo demuestran las excavaciones arqueológicas.
Ha abundado al señalar que "es imposible sacar la guerra de nuestras vidas porque, antes de que empiece una, ya hay quien está haciendo negocio, empresarios, banqueros y políticos, vendiendo armas" con "estrategias de muerte" para evitar "que se solucionen pronto y así permitir el negocio".
A su entender, solo "cuando empecemos a criticar policialmente qué ocurre en la guerra, los ciudadanos empezarán a decidir si los políticos, empresarios o banquero son decentes".
Sobre los movimientos migratorios, ha remarcado que lleva cerca de 40 años viéndolos con sus propios ojos. "Conozco la historia de la humanidad y no ha existido una época sin ellos por culpa de las guerras" porque ante comportamientos "brutales" la personas huyen porque no quieren sufrir.
Asimismo, ha evidenciado "el egoísmo el que vivimos y, a veces, el cinismo y la hipocresía con la que nos comportamos" ya que "solo nos preocupamos de los que nos golpea directamente" y mucho más allá de eso "lo que ocurre nos deja de interesar".
"Llevo 35 años cubriendo guerras y epidemias y de repente hay gente que se siente sobresaltada, hechizada, casi loca por una epidemia, ya pandemia, a nivel mundial", ha dicho en referencia al coronavirus.
"Parece sorprendente" y ha deseado que, al menos sirva para hacer entender "por qué la gente huye de donde hay guerra o enfermedades como el ébola, la cólera, la malaria, el paludismo o el sarampión".
COMPROMISO
Gervasio Sánchez ha rechazado que le llamen "periodista comprometido o sensible" porque "para mí el periodismo es compromiso" y, "si lo hemos olvidado o por casualidad hacemos lo contrario a lo que significa ese compromiso, estamos pisoteando los principios básicos" de esta profesión.
Ha añadido que aprendió en la universidad "que los periodistas debemos ser lo vigilantes del poder político y económico" y "mostrarnos siempre supercríticos e intentar acercar al público la mejor información para que éste tenga una salud informativa de calidad y sea menos manipulables".
Asimismo, ha apelado a "informar decentemente de lo que ocurre no y evitar caer en las trampas y las tentaciones del periodismo cuando vamos un poco acelerados".
Por otra parte, ha agradecido al Arzobispado de Zaragoza esta distinción, así como haberla recibido junto a la mención especial a título póstumo a la periodista de RTVE Alicia Gómez Montano, "porque los últimos años éramos compañeros en Reporteros Sin Fronteras". "Creo que es una mujer que se merece cualquier premio" y "lamentablemente se ha ido demasiado pronto".
El periodista y pareja de Alicia Gómez, José Juan Tortosa, ha subrayado la aportación de la homenajeada "al pluralismo y la televisión pública en este país", para recordar que fue directora de Informe Semanal entre 2004 y 2012 y subdirectora de Informativos en Televisión Española en la época en la que "se hizo el mejor periodismo que se ha hecho nunca" en el ente público.
"Me parece lamentable que, llegado un momento en el que hay un cambio político, eso repercuta en que la televisión pública pague el precio, haciendo que haya personas que acaben relegadas por razones de conveniencia política", ha esgrimido.
A su entender, una de las asignaturas que tiene pendiente la televisión pública "es conseguir que los profesionales que trabajan en ella lo hagan desde el pluralismo decente, la ausencia de manipulación, la profesionalidad y al margen de cualquier tipo de intereses políticos".
NARRACIÓN HUMANA
El arzobispo de Zaragoza, monseñor Vicente Jiménez, que ha sido el encargado de entregar ambos galardones, en un acto celebrado en el Alma Mater Museum, ha manifestado en su discurso que "en medio de la confusión, necesitamos una narración humana que nos hable de nosotros, de la belleza, la ternura".
A su entender, "en medio del mal hay que reconocer una luz más fuerte que la tiniebla", que es el bien, al tiempo que ha abogado por "resaltar la dignidad de las personas y los pueblos sin caer en la tentación de instrumentalizar las historias".
Ha tenido palabras para los dos periodistas distinguidos y ha explicado que este premio pretende "servir a la dignidad de la persona humana, a los derechos fundamentales" y reconocer a las personas "que se distingue por un compromiso ético más allá de lo político o de lo ideológico, y que también, de alguna manera, defienden los derechos del humanismo cristiano, los valores del Evangelio, que son la verdad, la justicia, la fraternidad y el amor".