A medida que las vacunas se despliegan "es probable que surjan variantes que escapen a las mismas"
La aparición de las nuevas variantes británica, sudafricana y brasileña de Covid-19 vuelve a poner contra las cuerdas al mundo y a los gobiernos, que ya están tomando medidas para evitar su propagación. En Europa son muchos los países, entre ellos España, que por ejemplo han suspendido los vuelos con Reino Unido, aunque los expertos avisan: hay que poner el acento en el verdadero reto que plantean estas cepas, y no es otro que preparar el sistema sanitario para su posible propagación. Y eso solo se logrará modificando las vacunas.
"Las variantes británica, sudafricana y brasileña han sido motivo de preocupación, pero a largo plazo, el hecho de que alguna de estas variantes específicas sea capaz de escapar a la inmunidad inducida por la vacuna no importa demasiado", apuntan desde Shore Capital. Los expertos de esta firma de inversión creen que a medida que las vacunas se despliegan, "es muy probable que surjan nuevas variantes que escapen a las mismas, por lo que llegarán de todos modos, incluso si no están aquí ahora".
Por eso, "lo que más importa es nuestra preparación para este escenario". Y la preparación consiste en la capacidad de garantizar una rápida actualización de las vacunas para que éstas, una vez modificadas y adaptadas a las nuevas cepas, "puedan ponerse en marcha". Shore Capital reconoce en un reciente informe en el que analiza las variantes descubiertas en las últimas semanas que si se da esta situación, la de tener que modificar las vacunas por una fuerte prevalencia de las nuevas cepas, esto provocará retrasos en el proceso de vacunación (en la UE, por ejemplo, el objetivo es ambicioso, ya que para este verano quieren tener al 70% de la población adulta vacunada), pero también dice que "al menos es tranquilizador que se estén desarrollando procesos y protocolos para desplegar rápidamente las vacunas modificadas" en caso de ser necesario.
Pero si estas variantes del coronavirus se extienden con rapidez, no solo habría que cambiar las vacunas. Como dicen desde esta firma de inversión, los gobiernos también deben prepararse para un mayor "bloqueo" que ayude a contrarrestar los contagios. Shore Capital recuerda que hasta ahora el enfoque frente al Covid-19 ha sido en gran medida el "principio de precaución", es decir, más vale prevenir que curar, lo que volvería a ser una estrategia acertada "si se sabe muy poco sobre una nueva cepa".
Los Veintisiete han optado por la prudencia ante las variantes británica, sudafricana y brasileña del virus, tras haberse detectado ya casos en casi todos los países europeos, y han acordado restringir más los viajes no esenciales, aunque no se cerrarán las fronteras interiores, al menos de momento, en aras de salvaguardar la economía.
Esta respuesta de la Unión Europea tiene una explicación: los gobiernos consideran que pocas personas han sido infectadas por el virus y no se han vacunado suficientes, por lo que han optado por limitar los viajes para evitar la llegada de nuevas variantes a corto plazo (ya que ahora los hospitales están al límite), y así quizá la inmunidad inducida por las vacunas que ya se están administrando pueda ayudar a que estas cepas no supongan una amenaza seria para el sistema sanitario.
"A más largo plazo, es de esperar que la llegada de las nuevas variantes se produzca en el contexto de una población con un alto grado de inmunidad, ya sea por las vacunas o por la infección natural", remarca Shore Capital, que cree que cuando llegue una nueva cepa "los individuos más jóvenes probablemente solo experimentarán una enfermedad leve y los más vulnerables ya habrán recibido una vacuna, lo que reducirá la gravedad de la enfermedad". Por ello, dicen los expertos de esta firma, "la presión sobre el sistema sanitario no debería ser preocupante en ese momento, ya que es muy poco probable que una variante pueda eludir por completo la inmunidad inducida por la vacuna, incluso si pudiera infectar a los ya vacunados".
Y es que esa es otra de las dudas que sobrevuelan entre los expertos estos días. ¿Qué pasa si las nuevas cepas son muy contagiosas y son capaces de escapar a la inmunidad que proporcionan las vacunas? En este sentido, Shore Capital recuerda que de momento no hay ningún estudio que revele si las nuevas variantes pueden infectar o no a las personas que han sido vacunadas, por lo que habrá que esperar. Es más, recuerda que estos estudios tampoco dicen nada aún sobre la "gravedad de la enfermedad que experimentaría alguien si se infectara con una nueva variante habiendo sido vacunado previamente". "Esos estudios tardan muchos meses en realizarse", concluye.