MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) ha lanzado un decálogo, y un vídeo, sobre la importancia de que los niños crezcan en ambientes saludables física y emocionalmente Los pediatras de Atención Primaria señalan la importancia de los factores individuales, sociales y culturales que inciden en las primeras etapas del desarrollo del niño.
Por este motivo, y con motivo de la celebración, el día 20 de noviembre, del Día Internacional del Niño, los pediatras han avisado de que es el momento de "aunar esfuerzos" para crear una "mayor" conciencia y sensibilización social respecto a que la violencia contra la infancia y adolescencia.
"Es un problema invisibilizado, pero en ningún caso menor, también en nuestro país", han dicho, para recordar que el Consejo de Europa estima que uno de cada cinco menores de 18 años ha podido ser víctima de alguna forma de violencia sexual. Además, diversas organizaciones de protección a la infancia ya han avisado de que uno de cada cuatro sufre violencia física o psicológica en cualquiera de sus manifestaciones.
"El Estado debe protegerles de todo tipo de violencia, malos tratos, desatención o abusos sexuales por parte de los padres o de quien los cuide. Debe adoptar las medidas preventivas, legislativas y sociales que lo garanticen", señala el decálogo en uno de sus puntos, al tiempo que destaca que una gran parte de estos casos ocurre en el seno familiar o su entorno social, por parte de las personas que deben cuidar y proteger a los niños, razones por las que en muchas ocasiones estas situaciones quedan ocultas.
En este punto, la presidenta de la AEPap, Concepción Sánchez Pina, ha informado de que menos del 10 por ciento de los casos de violencia contra la infancia se notifica o denuncia en el momento de conocerla, contribuyendo aún más a su invisibilidad. "Los profesionales que trabajamos con la infancia y adolescencia de manera próxima a ellos y a sus familias debemos conocer estar realidad. La protección de los menores y sus derechos está en manos de su familia, sus cuidadores y de los profesionales cercanos", ha añadido.
Por este motivo, en el vídeo que han difundido recuerdan que la Convención sobre los Derechos del Niño en su artículo 19 establece el derecho de los niños, niñas y adolescentes a la protección contra cualquier forma de violencia. "Esta fecha debe ser una llamada de atención y un recordatorio a toda la sociedad de que todos los niños, niñas y adolescentes tienen derechos y está en nuestras manos garantizarles un crecimiento y desarrollo libre de cualquier forma de violencia", apostillan desde la organización.
Esta declaración de los pediatras se enmarca dentro de los esfuerzos de AEPap por promover buenas pautas de crianza, un adecuado trato y una parentalidad positiva. "Los padres tienen una gran responsabilidad sobre los niños, desde el tipo de alimentación que se les proporciona como la forma de educarlos. Además, los ejemplos de actitud y comportamiento con los demás y el mundo exterior también influyen en el desarrollo de la personalidad y de las habilidades sociales de los hijos,", ha apostillado la doctora Sánchez Pina.
A su juicio, es importante demostrar un amor incondicional a cualquier edad con palabras, sonrisas y gestos, así como también usar el sentido del humor para enseñarle estilos de vida saludables en alimentación, actividad física, sueño, higiene o emociones.
Otro aspecto "positivo" en la crianza es el tiempo que se les dedica a diario con diversos tipos de juegos, sin la necesidad de dirigirle sus gustos o preferencias; así como educar desde el cariño con normas buenas que no utilicen la violencia, el castigo o la humillación; y fomentar la autonomía con dialogo y escucha o fortalecer su autoestima motivando sus capacidades son pautas que defiende la AEPap.
"Todos los niños y niñas tienen todos estos derechos, sin importar quiénes sean, dónde vivan o el color de su piel, la lengua que hablen o su religión. Ni su aspecto, condición social ni si tienen una discapacidad. Tampoco su modo de pensar o las ideas de sus padres, tumores o familiares. Ningún niño o niña será discriminado o se verá desprotegido por ningún motivo", zanja la organización en el decálogo.