MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
Un equipo de investigadores españoles, liderados por el director de la clínica MARGen de Granada, Jan Tesarik, ha descubierto, en un estudio publicado en la revista 'EC Gynaecology', un nuevo marcador de envejecimiento reproductivo que permite conocer la edad reproductiva de cada mujer, más allá de su edad cronológica.
Se trata del 'Factor de crecimiento insulínico 1', también denominado 'somatomedina' y conocido bajo la sigla IGF-1, una proteína con una alta similitud con la insulina pero, a diferencia de esta, su producción en el organismo humano es activada por la hormona de crecimiento.
En el trabajo se ha utilizado la concentración de IGF-1 en la sangre como una medida indirecta de la actividad de la hormona de crecimiento. Así, comparando la concentración de IGF-1, determinada en la sangre de mujeres de varias edades, con el valor normal para cada edad, el grupo de investigadores ha podido definir la edad reproductiva de cada mujer, que no siempre se corresponde con su edad cronológica.
"En el estudio hemos identificados muchos casos de mujeres con una edad reproductiva muy superior a la del calendario. La diferencia más llamativa fue en dos mujeres, de 31 y de 33 años, cuya edad reproductiva era de 52 y 62 años. En esta categoría, los mejores resultados de fecundación 'in vitro' fertilidad se alcanzan con administración de la hormona de crecimiento", ha explicado el doctor Tesarik.
Se trata, prosigue, del primer paso que lleva desde los actuales tratamientos hormonales a las ciegas hacía los tratamientos fundados en evidencias, basadas en métodos diagnósticos adecuados. Y es que, todas las personas tienen múltiples edades, aparte de la del pasaporte, dado que cada órgano envejece según su propio ritmo, el cual depende tanto de la predisposición genética como de diferentes factores relacionados con medioambiente y el estilo de vida.