Diagnosticar la enfermedad, hablar de ella y fijar un objetivo, claves para que las personas con obesidad pierdan peso

En concreto, las personas que son diagnosticadas de obesidad logran mejores resultados en la reducción de peso (entendida esta como una pérdida del cinco por ciento o más del peso corporal mantenida durante, al menos, un año) en comparación con aquellas que no han sido diagnosticadas (42% frente al 35%). Además, las personas con obesidad obtienen mayores pérdidas de peso cuando hablan sobre éste con un profesional médico (58%) y tienen citas de seguimiento (25%), en comparación con aquellas que no lo hacen (53% y 21%, respectivamente).

"Es fundamental que comencemos a tratar la obesidad como lo haríamos con cualquier otra enfermedad crónica, tomando un triple enfoque: diagnosticándola, hablando sobre ella y ofreciendo un seguimiento continuado con unos objetivos específicos. Estos tres pasos son igual de importantes y, como profesional médico, no debes saltarte ninguno de ellos si quieres ayudar a tus pacientes a tener éxito; no solo perdiendo peso, sino manteniéndolo. Con este triple enfoque podemos ayudar a más personas a mejorar el cuidado de la obesidad", ha dicho el coordinador en España del estudio, Javier Salvador.

En concreto, en España los resultados del trabajo han revelado que el 65 por ciento de las personas con obesidad no han hablado con su médico de perder peso en los últimos 6 meses. "El estudio subraya que es necesario abordar un gran número de áreas para mejorar el cuidado de la obesidad. Está claro que es necesaria una mayor colaboración entre los grupos de interés que trabajan por aquella solución que mejor se adapte a los pacientes. Las conversaciones entre las personas con obesidad y los profesionales médicos son un elemento fundamental para tratar la obesidad como una enfermedad crónica", ha apostillado la directora de Relaciones Institucionales de Novo Nordisk, Olga Espallardo.