Para la operación, exploración, conservación, mantenimiento, mejoras y expansión
Sacyr ha ganado una concesión en Brasil para la operación, exploración, conservación, mantenimiento, mejoras y expansión de un tramo de más de 204 kilómetros de la carretera RSC-287 durante 30 años por un importe total de 2.704 millones de reales brasileños, en torno a 430 millones de euros.
El consorcio con el que se presentaba la empresa española, denominado Vía Central, presentó ante las autoridades una tarifa de peaje de 3,36 reales, unos 0,53 euros, es decir, la más barata de todas las presentadas.
Según consta en el acta de licitación publicada por el Gobierno del Estado brasileño de Río Gran de del Sur, la tarifa más alta presentada por sus rivales ascendía a 7,3 reales, lo que supone que la oferta de Sacyr es hasta un 54,5% más barata. Además, la prensa local sitúa en 7 reales (1,11 euros), el precio de los peajes actuales del actual administrador de la infraestructura, Empresa Gaúcha de Rodovias (EGR).
El tramo que explotará Sacyr discurre entre Tabaí, en el cruce con la BRS-386, kilómetro 28,03, y Santa Maria, en su cruce con la ERS-509, kilómetro 232,54, lo que supone un tramo total de 204,5 kilómetro de extensión.
En Brasil, Sacyr ya inició a principios de año las obras de construcción del tramo de la línea dos del metro de Sao Paulo, un proyecto que se adjudicó en consorcio y que está presupuestado en 443,2 millones de euros.
Con estos contratos, el grupo que preside Manuel Manrique refuerza la presencia con que ya contaba en la construcción de este metro, así como en el conjunto del mercado constructor brasileño, en línea con su estrategia de crecimiento internacional.