La operadora recoge con caídas en bolsa sus últimos resultados
Vodafone ha anunciado este miércoles unos ingresos de 11.638 millones de euros en el tercer trimestre fiscal (de octubre a diciembre), lo que implica una caída del 0,4% frente a los 11.684 millones del mismo periodo del ejercicio previo. Los ingresos por servicios cayeron un 1,3%, hasta los 9.520 millones desde los 9.647 millones.
La operadora destaca la ralentización de la tendencia trimestral impulsada por Europa. Así, explica que los descensos en Alemania, Italia y España se compensan parcialmente con un buen crecimiento en el Reino Unido y otros países europeos.
En nuestro país, la compañía ha facturado 971 millones en el tercer trimestre fiscal, un 9,8% menos debido a la competencia en precios y a una caída de los ingresos de 'roaming'.
La operadora se enfrenta al doble peligro de un panorama extremadamente competitivo y unas condiciones económicas en deterioro
Los ingresos por servicios en Alemania disminuyeron un 1,8%, hasta 2.882 millones, debido en gran parte a la pérdida de clientes desde el segundo semestre del ejercicio 2022 por la aplicación de la nueva legislación sectorial.
"Aunque seguimos cumpliendo nuestras previsiones financieras para el año, el reciente descenso de los ingresos en Europa muestra que podemos hacerlo mejor", ha declarado Margherita Della Valle, consejera delegada de Vodafone.
"Tenemos que hacer más por nuestros clientes, ofreciéndoles una conectividad de calidad de forma sencilla. Ya hemos tomado medidas, como simplificar nuestra estructura para dar a los mercados locales plena autonomía y responsabilidad para tomar las mejores decisiones comerciales para sus clientes. Además, tenemos iniciativas en marcha para generar alrededor de la mitad de nuestro objetivo de 1.000 millones de euros de ahorro de costes. Queda mucho por hacer y nuestro objetivo es ofrecer un mejor servicio a nuestros clientes, convertirnos en una empresa más sencilla y generar crecimiento", ha añadido Della Valle.
Vodafone recoge este miércoles los resultados con caídas en bolsa (-2,8%). Los analistas señalan que la operadora se enfrenta al doble peligro de un panorama extremadamente competitivo y unas condiciones económicas en deterioro, y apuntan que estos últimos resultados ponen de relieve los efectos de ambos.
"En un sector en el que la fiabilidad y la disponibilidad se dan por supuestas, el factor diferenciador clave es simplemente el precio. Sin embargo, la inflación y el aumento de los costes de la energía han obligado a subir los precios en varios mercados de la empresa, lo que no es de agradecer, dada la competitividad de los precios en otros lugares", explica Richard Hunter, responsable de inversiones en Interactive Investor. "Esto ha provocado la pérdida de algunos clientes, sobre todo en Alemania, que representa el 29% de los ingresos totales del grupo. La nueva legislación también se ha sumado a los retos locales, al tiempo que disminuían los ingresos por visitas y 'roaming'. Italia y España también sufrieron presiones durante el trimestre debido a la competencia de precios", añade.
"Los problemas de Vodafone no acaban ahí. La deuda neta de más de 45.000 millones de euros, el tibio crecimiento europeo y la capacidad 5G tienen un precio enorme", indica Hunter.