La compañía ha ganado 1.129 millones de dólares, un 55% menos
Tesla ha presentado este martes los resultados correspondientes al primer trimestre del año, en el que ha obtenido un beneficio neto de 1.129 millones de dólares, lo que supone una caída del 55% desde los 2.513 millones cosechados en el mismo periodo del año anterior. Sin embargo, las acciones de la firma se han disparado hoy miércoles un 12,06% en Wall Street ante el anuncio que ha hecho Elon Musk sobre la nueva producción de "modelos más asequibles".
Estas cifras se traducen en un beneficio por acción (BPA) de 0,34 dólares, tras anotarse una caída del 53% en la comparativa interanual, mientras que el BPA ajustado ha sido de 0,45 dólares, por debajo de los 0,51 dólares por título avanzados por el consenso de analistas.
Por su parte, los ingresos han caído un 9% en relación al primer trimestre de 2023, hasta los 21.301 millones de dólares, frente a los 22.150 millones previstos por el consenso. La facturación procedente de la venta de automóviles se ha desplomado un 13%, hasta los 17.378 millones, mientras que la generación y almacenamiento de energía ha contribuido con 1.635 millones (+7%) y la partida de servicios y otros ingresos ha aportado 2.288 millones (+25%).
La compañía asegura que la caída de la facturación responde principalmente a la "disminución en las entregas de vehículos, en parte debido a la actualización del Model 3 en la fábrica de Fremont y la ruptura de la producción de la Gigafactory de Berlín".
"Las ventas mundiales de vehículos eléctricos siguen bajo presión, ya que muchos fabricantes de automóviles dan prioridad a los híbridos sobre los vehículos eléctricos. Si bien es positivo para nuestro negocio de créditos regulatorios, preferimos que la industria siga impulsando la adopción de vehículos eléctricos, lo cual está en línea con nuestra misión", destaca la compañía.
Además, la firma sigue comprometida "con la reducción de costos en toda la empresa, incluida la reducción del costo por vehículo".
De cara al futuro, Tesla asegura haber actualizado su "futura línea de vehículos para acelerar el lanzamiento de nuevos modelos", unos planes que incluyen "modelos más asequibles", que utilizarán "aspectos de la plataforma de próxima generación".
"Esta actualización puede dar como resultado una reducción de costos menor de lo esperado anteriormente, pero nos permite aumentar prudentemente nuestros volúmenes de vehículos de una manera más eficiente en términos de gasto de capital durante tiempos de incertidumbre", asegura.
De hecho, en una llamada con inversores posterior a la presentación de resultados, Musk ha anunciado que la producción de estos nuevos modelos podría comenzar a "principios de 2025, si no a finales de este año", cuando la previsión anterior era que empezase en la segunda mitad de 2025.
Esto, unido a lo que ha dicho Musk sobre las inversiones de Tesla en infraestructura de inteligencia artificial (ha comentado que la compañía está en conversaciones con "un importante fabricante de automóviles" para obtener la licencia de su sistema de asistencia al conductor, que se comercializa en EEUU como la opción de conducción autónoma total o FSD) es lo que ha terminado de dar alas a la cotización.
En lo que respecta a la financiación, la firma cuenta con "suficiente liquidez" para cubrir su "hoja de ruta de productos, planes de expansión de capacidad a largo plazo y otros gastos". "Además, gestionaremos el negocio de manera que mantengamos un balance sólido durante este período incierto", ha agregado.
Asimismo, espera que sus ganancias relacionadas con el hardware "vayan acompañadas de una aceleración de la inteligencia artificial, el software y las ganancias basadas en flotas".
En su llamada con inversores, Musk también ha afirmado que en Tesla creen que, tras los problemas que han provocado las interrupciones en la cadena de suministro del Mar Rojo, "el segundo trimestre será mucho mejor".
Además, al ser preguntado si tiene intención de dejar Tesla dados sus numerosos trabajos, incluido el de liderar SpaceX, controlar X (anteriormente Twitter) y dirigir otros negocios, Musk no respondió, pero sí dijo que trabaja incansablemente y que seguirá haciéndolo para asegurarse de que Tesla sea "muy próspera".
Antes de concluir la llamada, Martin Viecha, vicepresidente de relaciones con inversores de Tesla, dijo que dejará la empresa en un par de meses tras siete años en la compañía.
BANK OF AMERICA ELEVA A 'COMPRAR'
Tras los resultados, los analistas de Bank of America han decidido elevar su recomendación sobre los títulos de Tesla a 'comprar', desde el 'neutral' anterior, aunque mantienen el precio objetivo en 220 dólares por título, lo que le otorga un potencial de revalorización cercano al 35% desde los actuales niveles de cotización.
En este sentido, los analistas de BofA aseguran que "los resultados del primer trimestre despejan una plataforma de catalizadores negativos", ya que han venido acompañados de "noticias positivas sobre productos, fuertes inversiones en infraestructura de IA, y un posible acuerdo de licencia de FSD con OEM global".