El beneficio de la compañía se situó en los 32 millones de euros en este periodo
El resultado neto atribuible de Sacyr fue de 32 millones de euros en el primer trimestre de 2020, lo que supone un 16% menos que en el mismo periodo del año anterior, según ha informado la compañía este martes en un comunicado, en el que destaca la afectación por el Covid-19. Además, ha realizado una provisión de 30 millones de euros "por prudencia" y ante la "actual incertidumbre" de la crisis en las cuentas del primer trimestre del año.
Sacyr obtuvo un EBITDA de 166 millones de euros hasta marzo, un 16% más que el registrado en el primer trimestre de 2019. Explican que alrededor del 80% del EBITDA procede de activos concesionales distribuidos en las tres divisiones de negocio.
Por su parte, los ingresos crecieron el 1% entre enero y marzo, hasta los 985 millone, y mejoró la rentabilidad de los negocios en el primer trimestre, uno de los objetivos clave para la compañía. El margen de EBITDA aumentó en 210 puntos básicos, hasta alcanzar el 16,8%.
Por actividades, en el primer trimestre, Sacyr registró un crecimiento en sus tres áreas de negocio. El EBITDA de Ingeniería e Infraestructuras creció a un ritmo del 35%, el de Concesiones avanzó el 8% y el de Servicios, el 5%. Mientras, respecto a la cartera de ingresos futuros, cerró el trimestre en 40.595 millones de euros. En Europa, 50%, en LATAM 46%, en Norteamérica 1% y en otros países el 3%, gracias al gran éxito en la adjudicación de diferentes proyectos.
La compañía destaca que ha reforzado su presencia en Latinoamérica con varios proyectos en Chile y en EEUU, donde ha logrado la construcción de una variante de la carretera US59 en Texas. En España crece con contratos en las tres divisiones de negocio.
El grupo que preside Manuel Manrique asegura que sus negocios de construcción, concesiones y servicios "continúan mostrando la fortaleza operativa de los últimos trimestres a pesar del impacto" derivado de la crisis del coronavirus. Según detalló, está realizando las oportunas gestiones para "minimizar" este impacto, por considerar que "se trata de una situación coyuntural" que, conforme a sus "estimaciones más actuales, no compromete la realización de sus actividades básicas, si bien se están adaptando teniendo en cuenta las circunstancias".
AUMENTA SU DEUDA
La deuda neta del grupo se situó en 4.438 millones de euros a cierre de marzo, frente a los 4.315 millones de cierre de 2019. El aumento se debe, en gran medida, a la actividad inversora de la compañía en nuevos proyectos concesionales. La compañía continuó con su estrategia de rotación de activos maduros con la desinversión del 95% de la Autovía del Guadalmedina. El 47,5% ya está formalizado y el 47,5% restante está pendiente de las correspondientes autorizaciones. El importe global de las dos operaciones es de 455 millones de euros.
Sacyr mantiene una política regular de dividendos. En febrero, repartió un scrip dividend de una acción nueva por cada 46 antiguas.
Las previsiones de tesorería del grupo para 2020 muestran disponibilidad de liquidez sin tensiones, dado que una gran parte de la financiación tiene vencimientos en el largo plazo. Además, se han incrementado de una manera significativa las líneas de crédito disponibles con las que se tienen cubiertos los vencimientos de este año.
PARTICIPACIÓN EN REPSOL
Sacyr explica que tiene totalmente cubierto el riesgo financiero ante bajadas del precio de la acción de Repsol y continúa con la gestión activa de su participación en la petrolera. La compañía ha decidido además ajustar a la baja el valor contable al que tiene contabilizada su participación del 8% en Repsol, de forma que la ha situado en 9,66 euros por acción, importe un 30,6% inferior respecto al de 13,93 euros en que la fijó al finales de 2019.
Sacyr se anotó además una contribución negativa de 25 millones en los resultados trimestrales en virtud de la parte del resultado del grupo energético que se apunta por su porcentaje en su capital.