El beneficio en 2023 cerró en 5.157 millones, aumentando un 3,7% respecto a 2022
El fabricante alemán de automóviles Porsche ha advertido este martes que la rentabilidad disminuirá en este ejercicio 2024. No obstante, la compañía ha elevado su dividendo gracias al aumento del beneficio en el ejercicio fiscal 2023.
En concreto, la compañía germana dijo el martes que espera que su rentabilidad operativa sobre las ventas disminuya a entre el 15% y el 17% en 2024 después de conseguir un margen del 18% el año pasado, estable respecto al de 2022. A largo plazo, el grupo radicado en Stuttgart aspira a un rendimiento operativo sobre ventas superior al 20%.
Para explicar estas perspectivas de rentabilidad más prudentes, la empresa hizo hincapié en "la renovación completa de su gama de productos en 2024", así como de las peores condiciones macroeconómicas mundiales o "las amortizaciones de los costes de desarrollo capitalizados y las continuas inversiones en la marca y el ecosistema Porsche". Porsche lanzará cuatro nuevas modelos en sus líneas Panamera, Macan, Taycan y 911.
"2024 va a ser un año de lanzamientos de productos para Porsche, más que cualquier otro año de nuestra historia. Introduciremos en la carretera una gran variedad de deportivos estimulantes, que harán las delicias de nuestros clientes en todo el mundo. Esto pondrá el viento a nuestra espalda en los años venideros", ha indicado el presidente de Porsche, Oliver Blume, en un comunicado.
En su informe de resultados, Porshce señala que consiguió un beneficio neto de 5.157 millones de euros, un 3,68% más que en el ejercicio anterior. Los ingresos de Porsche aumentaron un 7,7% respecto a 2022, hasta 40.530 millones de euros, unas cifras que se situaron por encima de las perspectivas de los analistas, que esperaban unas ventas de 40.290 millones de euros.
Además, las entregas de vehículos aumentaron un 3,3%, hasta 320.221 unidades. El flujo de caja neto de Porsche procedente de sus operaciones automovilísticas terminó el año pasado en 3.970 millones de euros. De cara a 2024, la empresa prevé unas ventas de entre 40.000 y 42.000 millones de euros este año y aspira a conseguir un margen EBITDA de entre el 24% y 26%.
Como resultado, la empresa propuso un dividendo de 2,30 euros por acción ordinaria, frente a los 1,00 euros de 2022. Según ha explicado Porsche, el objetivo de la empresa es distribuir el 50% de su beneficio neto después de impuestos a los accionistas a medio plazo.
"Porsche demostró en 2023 que somos resistentes, altamente rentables y financieramente robustos incluso en tiempos volátiles. Y nos beneficiamos de una estructura de ventas aún mejor equilibrada que en el pasado. Sobre esta base, estamos sentando las bases en 2024 para empezar con buen pie en 2025. Nuestro objetivo sigue siendo el éxito sostenible de la empresa. Nuestros clientes y empleados, la empresa y nuestros accionistas salen beneficiados", ha indicado el director financiero Lutz Meschke.
Cabe señalar que la matriz de Porsche, Volkswagen, advirtió la semana pasada de que el crecimiento de las ventas iba a ralentizarse debido a unas condiciones económicas más débiles, la creciente competencia y el aumento de los costes.