La compañía se enfrenta a un "entorno económico y geopolítico incierto"
Louis Vuitton Moët Hennessy (LVMH) ha reportado este martes ingresos por valor de 60.753 millones de euros en los primeros nueve meses del año, lo que representa una caída del 2% en comparación con los 62.205 millones cosechados en el mismo periodo del año anterior. Sus acciones han caído un 3,68% este miércoles y han arrastrado al conjunto del sector de productos de lujo.
"En el tercer trimestre, la ligera caída en los ingresos se debió principalmente al menor crecimiento observado en Japón, debido esencialmente a la fortaleza del yen", explica el grupo.
La facturación estuvo liderada por la división de moda y artículos de cuero, que aportó 29.922 millones al total, un 3% menos que hace un año. Sin embargo, el 'holding' asegura que esta sección "mostró una buena resiliencia y ganó cuota de mercado", con la "gran visibilidad" de la que gozaron Louis Vuitton y Christian Dior durante el verano con los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024.
"Louis Vuitton volvió a dejarse llevar por su notable capacidad de innovación en el mundo de los viajes. Se presentaron muchas novedades en el sector de la marroquinería", explica la compañía, que añade que Christian Dior "mantuvo su impulso creativo, fusionando herencia y modernidad, como se ve en su nueva línea Miss Dior".
Además, durante los últimos meses, el grupo experimentó cambios de calado en sus principales marcas, con la entrada de los dos nuevos directores creativos: Michael Rider en Celine y Sarah Burton en Givenchy.
La segunda actividad que más ingresos dejó en las arcas de la empresa fue la de venta al por menor selectiva, que consiguió elevar su facturación en un 1% hasta alcanzar los 12.559 millones de euros, gracias al "desempeño notablemente bueno" de Sephora, que "continuó ganando participación de mercado en América del Norte, Europa y Medio Oriente".
"DFS vio que la actividad comercial se mantuvo por debajo de su nivel anterior a Covid de 2019, con marcadas diferencias en el tráfico turístico entre sus distintos destinos. Le Bon Marché siguió creciendo, impulsado por la estrategia de diferenciación de los grandes almacenes, con una selección de productos y servicios continuamente renovada y una programación única de eventos", asegura.
Por mercados, LVMH subraya que "Europa y Estados Unidos registraron un ligero crecimiento con un perímetro de consolidación y una base monetaria constantes, Japón siguió logrando un crecimiento de ingresos de dos dígitos y el resto de Asia reflejó en particular el fuerte crecimiento del gasto de los clientes chinos en Europa y Japón".
El grupo ha asegurado atravesar un "entorno económico y geopolítico incierto", aunque "mantiene la confianza y mantendrá una estrategia centrada en mejorar continuamente el atractivo de sus marcas, aprovechando la autenticidad y la calidad de sus productos, la excelencia en la distribución y una organización ágil".
"LVMH aprovechará sus poderosas marcas y el talento de sus equipos para reforzar una vez más su posición de liderazgo global en artículos de lujo en 2024", concluye.