La compañía atraviesa un entorno "desafiante"
Bridgestone, fabricante japonés de neumáticos, ha cerrado 2023 con un beneficio atribuible neto de 331.305 millones de yenes (2.046,9 millones de euros), un 10,3% más que lo conseguido en 2022, según reporta la compañía en sus resultados anuales publicados este viernes.
La compañía japonesa indica que el año pasado, en su negocio de neumáticos 'premium', el entorno general de demanda de neumáticos de reemplazo fue "desafiante", y en medio de una disminución interanual en el volumen de ventas global, por lo que reforzó su enfoque en el ámbito 'premium'.
Asimismo, señala que en cuanto a los neumáticos de reemplazo para automóviles, ha promovido la gestión estratégica de precios, trabajando simultáneamente para reducir pérdidas y áreas no rentables, principalmente mediante la expansión de las ventas de neumáticos de diámetro de llanta alto, que tuvieron relativamente poco impacto en los cambios ambientales y mantuvieron una demanda estable.
Respecto a los resultados comerciales del año fiscal finalizado el 31 de diciembre, señala que "ha quedado claro que existe una falta de respuesta para abordar los cambios", y se ha vuelto urgente para el grupo mejorar su gestión "para responder rápidamente al cambio, la calidad y velocidad de nuestro ciclo PDCA ('Plan', 'Do', 'Check', 'Act') en el próximo año fiscal".
Esta valoración la hace tras dar a conocer que el año pasado, su cifra de negocios creció en 2023 un 5%, llegando hasta los 4,13 billones de yenes (26.652,4 millones de euros), cuando el año anterior el crecimiento fue a doble dígito: del 26%.
El fabricante añade que su objetivo de convertirse en "un Bridgestone 'fuerte' y capaz de adaptarse a los cambios", fijado a principios de ejercicio, "sigue siendo un reto".
Bridgestone explica que la situación de la demanda de neumáticos nuevos "se está volviendo más grave de lo esperado", sobre todo en su negocio de camiones y autobuses en América del Norte.
Asimismo, señala que en su negocio europeo, "que ha sido un problema de gestión para el Grupo en términos de rentabilidad y base empresarial", la debilidad en la base del canal de ventas y otros factores se han hecho evidentes para la empresa "en el severo entorno empresarial", y añade que "quedan cuestiones por abordar para mejorar la situación".
El beneficio operativo de Bridgestone el año pasado fue de 481.775 millones de yenes (2.976,6 millones de euros), un 9,2% más que el año anterior. Las ganancias por acción fueron de 483,99 yenes por título (2,99 euros) y registró un flujo de caja por actividades operativas de 661.433 millones de yenes (4.086,6 millones de euros).
Para 2024, Bridgestone espera obtener ingresos por 4,43 billones de yenes (27.370,3 millones de euros) y un beneficio neto de 359.000 millones de yenes (2.218 millones de euros) en operaciones continuas, un 8,9% más que lo conseguido en 2023.
"El entorno operativo del Grupo seguirá requiriendo especial atención debido a diversos factores, como las fluctuaciones en los tipos de cambio y los precios de las materias primas, la incertidumbre económica global y las condiciones políticas internacionales inestables. En medio de tal entorno, el Grupo espera lograr los siguientes resultados generales mediante la implementación constante de medidas establecidas por la 'Aspiración Estratégica a Largo Plazo 2030'", concluye Bridgestone.