El beneficio es un 26% superior al conseguido en el anterior año fiscal
BHP, una de las más importantes compañías mineras del mundo, ha publicado este martes los resultados correspondientes a su cuarto trimestre fiscal (segundo trimestre de 2022), un período que se ha cerrado con el mayor beneficio de la compañía desde 2011. Las ganancias de la empresa australiana han ascendido hasta los 21.319 millones de dólares, un 26% más que hace un año (16.985 millones).
Asimismo, BHP ha anunciado que el dividendo final asciende a 8.900 millones de dólares, es decir, 1,75 dólares por acción, lo que eleva el pago total del año a 16.500 millones de dólares, el mayor desembolso en sus 137 años de historia.
Además, la minera terminó el año fiscal con una deuda neta de 333 millones de dólares, significativamente por debajo de su rango objetivo de 5.000 a 15.000 millones de dólares. A lo largo de los últimos 12 meses, BHP generó más de 24.000 millones de dólares de exceso de efectivo.
Mike Henry, consejero delegado de la compañía, indica que “estos sólidos resultados se debieron a la seguridad y fiabilidad de las operaciones, la ejecución de los proyectos y la disciplina de capital, que nos permitieron aprovechar el valor de los buenos precios de las materias primas”. “BHP sigue siendo el productor de mineral de hierro de más bajo coste a nivel mundial y hemos conseguido un récord de ventas anuales de Western Australia Iron Ore”, ha añadido.
Según el CEO, BHP entra en el año financiero 2023 “en gran forma estratégica, operativa y financiera, y bien preparada para gestionar un entorno incierto a corto plazo”. “Durante el año, unificamos la estructura corporativa de BHP, fusionamos nuestro negocio de Petróleo con Woodside, completamos las ventas de nuestras participaciones en los activos de carbón energético de BMC y Cerrejón, y decidimos mantener y operar nuestro negocio de carbón energético de Nueva Gales del Sur hasta el cierre de la mina en 2030”, ha explicado.
Con todo, los beneficios del mayor negocio de BHP, el mineral de hierro, descendieron a 19.500 millones de dólares, frente a los 24.300 millones de hace un año. La empresa declaró que está estudiando opciones para aumentar la producción anual hasta 330 millones de toneladas, frente a los 283 millones del año pasado.
Por último, Henry ha indicado que esperan que China se convierta “en una fuente de estabilidad para la demanda de materias primas en el próximo año, con el apoyo de las políticas que se van afianzando”. Al mismo tiempo, desde BHP esperan ver una desaceleración en las economías avanzadas a medida que se endurezca la política monetaria, “así como la continua incertidumbre geopolítica y las presiones inflacionistas”.
“Las repercusiones directas e indirectas de la crisis energética europea son un punto de especial preocupación. La rigidez de los mercados laborales seguirá siendo un reto para las cadenas de suministro globales y locales”, ha sentenciado el consejero delegado de la compañía.