El vocabulario refleja la naturaleza de una persona
La forma de hablar de una persona dice mucho sobre su naturaleza. En el vocabulario que emplea se reflejan rasgos del carácter que muestran si se trata de alguien tímido, valiente o ingenioso, entre otros aspectos.
Lee además: Los 10 mejores libros escritos por personas exitosas
Por este motivo hay que prestar mucha atención a las palabras que se emplean para construir un discurso, pues de ellas dependerá que se genera más o menos confianza. En este sentido, la prestigiosa revista TIME ha elaborado un estudio sobre el vocabulario empleado por las personas que más recelo provocan.
¿Cuáles son las diez palabras más usadas por las personas que inspiran menos confianza?
1- Es posible.
Hay que tener mucho cuidado con esta palabra. Refleja cierta falta de capacidad a la hora de realizar las tareas encomendadas. Hay que mostrar mayor seguridad a la hora de hablar.
2- No pasará.
No confirmar conductas futuras puede llegar a crear un ambiente negativo, por lo que hay que ser más decisivo a la hora de expresarse.
3- Generalmente.
Es un concepto que demuestra cierta falta de control sobre la información que se posee. No hay que permitir que se noten estas debilidades y el lenguaje debe ser más concreto. De esta forma, se transmite una mayor sensación de confianza.
4- Sospecha.
No se puede usar la palabra 'sospechoso' en ninguna circunstancia, salvo en cuestiones de materia judicial. Hay que usar términos más contundentes y explicar el motivo de su uso o cualquier argumento carecerá de bases creíbles.
5- Imposible.
Palabra terminalmente prohibida. Cualquier persona con la que se interaccione va a notar una importante falta de confianza en el mismo momento en el que se mencione este concepto. Si realmente se considera que algo puede llegar a resultar imposible, es mejor omitirlo de la conversación.
6- Preocupación.
No es conveniente confesar las preocupaciones porque reflejan cierta falta de confianza en las habilidades que se poseen. Lo mejor es exponer los temas que causan preocupación y ofrecer soluciones sin que se note la inquietud que provocan.
7- Confusión.
Expresar la confusión puede llevar a crear todavía más confusión. Es mejor no hacer referencia a que un tema puede confundir porque da la sensación de que se desconocen los aspectos de la materia a tratar.
8- Necesidad.
Expresar necesidades de forma reiterativa da lugar a pensar que se trata de una persona necesitada y carente de recursos. Hay que hacer demandas de una forma más convincente.
9- Dilema.
Este último concepto denota una clara situación de confusión. Refleja que la persona que lo emplea está realmente perdida y no sabe cómo actuar. Hay me mostrar mayor confianza y seguridad a la hora de tomar decisiones.
10- Probablemente.
Es una palabra que lleva a pensar que no se está totalmente seguro de lo que se habla y que no se tienen todos los datos para abordar la materia en cuestión.
Leer más:
- El panorama puede estar poniéndose feo para los mercado: el Ibex podría irse a los 9.200 puntos
- Los 14 valores que enamoran a los grandes gestores de los fondos de inversión