Si Tsipras se cansa de esperar y acude a Putin el conflicto podría alcanzar una nueva dimensión geoestratégica
A media sesión de este viernes, y sin hacer ruido, tenemos al Ibex cotizando ya por encima de los máximos de 2014 y subiendo un 1,5%. Es decir nuestro selectivo está dejando atrás la, tan comentada, resistencia de los 11.249 puntos. Eso, a base de una jornada tras otra de discretos movimientos que, aun así, le han permitido conseguir este objetivo.
Tras alcanzar este objetivo, el siguiente está en los 12.000 puntos como “cifra psicológica” y los 12.250 puntos como “resistencia real”.
CUIDADO CON GRECIA, QUE PODRÍA AGUARNOS LA FIESTA
Para que el Ibex continúe subiendo el contexto tiene que ser favorable y, si la situación de Grecia no termina de solucionarse, las cosas podrían torcerse. De hecho, este viernes MarketWatch publica un inquietante artículo, titulado “Grecia está lista para jugar la carta de Rusia” y firmado por el analista político Darrell Delamaine, en el que se advierte de que, si esto ocurre, se daría “una nueva dimensión geoestratégica a la crisis del euro”.
“El primer ministro griego, Alexis Tsipras, ha cambiado su visita a Vladimir Putin, prevista para mayo, para principios del mes que viene. Frente a la intransigencia de la Unión Europea y sus acreedores para frenar la austeridad y aliviar la carga de la deuda, el Gobierno griego está tanteando la perspectiva de buscar ayuda en Rusia”, señala el artículo.
El primer ministro griego, Alexis Tsipras, ha cambiado su visita a Vladimir Putin, prevista para mayo, para principios del mes que viene
Añade Delamaide que, aunque la economía griega puede representar una porción insignificante del PIB de la Zona Euro, su localización estratégica para Europa, Asia y Oriente Medio es de gran importancia geoestratégica.
“Es por eso que Estados Unidos ha trabajado tan duro en la posguerra para mantener a Grecia fuera del campo soviético y por lo que la ha apoyado como una pieza clave en la OTAN”.
Lea también: Joseph Stiglitz asegura que Alemania es el problema, no Grecia
“Muchos ya culpan a la Unión Europea de desatar la crisis en Ucrania al insistir en que Kiev debía elegir entre la opción de Bruselas o Moscú. Ahora, en lo que es un enfoque estrecho de miras, la UE está dispuesta a, no sólo expulsar a Grecia del Euro, sino también a deshacer 70 años de esfuerzo por mantener la estabilidad”, añade este experto.
Recuerda este analista, finalmente, que Tsipras, quien aún no ha perdido la esperanza, va a Berlín la próxima semana para reunirse de nuevo con Merkel y otros funcionarios alemanes.
Lee además:
Rusia evalúa ayudar financieramente a Grecia después de que Tsipras defendiera a Moscú
Merkel descarta alcanzar un acuerdo con Grecia durante el Consejo Europeo