Día de la Mujer Trabajadora: sólo una de cada cuatro nuevas empresas tienen mujeres entre sus directivos
El porcentaje de directivas en el sector emprendedor desde 2008 no ha superado el 28%
Educación y negativización de la maternidad, entre las principales causas de la falta de igualdad de oportunidades, según los expertos
El papel de la mujer en el mundo empresarial sigue siendo la gran asignatura pendiente en materia de igualdad. El número de cargos de representación ocupados por directivas en España siempre ha sido sensiblemente inferior al de sus colegas varones y nunca ha llegado al 30% de los puestos creados en nuevas empresas.
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Según un reciente estudio de Axesor, sólo uno de cada cuatro cargos de representación de las nuevas empresas que se ponen en marcha en España es ocupado por mujeres. En el año pasado, 26.832 mujeres fueron inscritas como representantes de empresas de nueva creación, un 25,8% del total. Esta agencia de rating ha analizado el papel de la mujer en la actividad emprendedora en nuestro país y revela que los hombres ocuparon 70.866 cargos, lo que supone un 68,15% del total de nuevas sociedades creadas en 2014.
La agencia extiende su estudio al peso que las féminas han tenido en el inicio de nuevos negocios a lo largo de la crisis y nunca ha sido superior al 28% en los nuevos cargos creados desde 2008, aunque tampoco ha descendido del 24%.
Las causas para explicar esta situación son variadas. Tal y como indica Raquel Caballero, formadora de habilidades directivas en Emotional Tuner, la base está en la educación o mejor dicho en “la falta de una escolarización y formación desde la igualdad, que fomente desde nuestra base como personas el relacionarnos desde la equidad de oportunidades”.
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En las empresas se penaliza el ser madre pero no el ser padre
Atribuye Caballero también esta situación a la escasez de políticas de igualdad por parte de quienes gobiernan, “situación muy grave en una sociedad democrática”. Añade además otro hecho insólito: “En las empresas se penaliza el ser madre pero no el ser padre".
La maternidad se negativiza desde el propio embarazo de la mujer a la baja maternal y posteriormente si pide una reducción de jornada para criar a su hijo/a, sumándole que ‘coinciliar’ se entiende que es cosa de mujeres”. En cambio, concluye, “un hombre con hijos, a nivel laboral tiene un atributo muy positivo ya que se considera que será un trabajador aún más comprometido con la empresa debido a sus cargas familiares”.
SANIDAD, EDUCACIÓN Y COMERCIO, LOS SECTORES CON MÁS NUEVAS DIRECTIVAS
Afirma el informe de Axesor que donde más mujeres hay ocupando cargos de representación es en aquellos sectores donde más empresas se han creado: el sector de comercio, con 6.244 mujeres en 2014 y una representatividad del 26,36% sobre el total de cargos. Pero dos sectores destacan por encima de los demás respecto a la presencia femenina en cargos de representación de las nuevas empresas, afirma el estudio: sanidad y educación.
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En el segmento de actividades sanitarias y de servicios sociales en 2014 se inscribieron 1.016 mujeres en los cargos de representatividad, de un total de 2.250 puestos, es el que más se aproxima a una cierta paridad, pues la representatividad llega al 40,32%. El otro sector donde la presencia femenina es más significativo es el de educación, con 608 cargos, un 34,72% del total.
Caballero, que también es coordinadora del TedxBarcelonaWomen, explica el porqué hombres y mujeres se asocian en mayor medida con unos sectores determinados y cree que tradicionalmente se etiqueta uno y otro género a unas actividades: “A modo de ejemplo podríamos decir que a la mujer se le otorga un papel dentro de proyectos sociales, administrativos y comercio familiar y al hombre más dentro del sector tecnológico o industrial”.
Las empresas dirigidas por mujeres están sabiendo sortear mucho mejor la crisis
¿Qué podríamos hacer para igualar la balanza, llegar a un equilibrio? se pregunta Caballero. La respuesta: “Invertir en las mujeres tanto en políticas que favorezcan a las empresas en ayudas para cubrir los gastos que supone la baja maternal y demás necesidades, invertir en una educación desde la equidad, así como en fomentar el liderazgo femenino, dado que es una competencia que favorece altamente la sostenibilidad, crecimiento y desarrollo de una empresa, de un país”. Y lanza una aseveración final: “Es por todos sabidos, y así se afirma desde el El Proyecto GEM (Global Entrepreneurship Monitor) que las empresas dirigidas por mujeres están sabiendo sortear mucho mejor la crisis”.
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