Los analistas consideran que la tasa se mantendrá en el 5-5,25% hasta finales de año
La Reserva Federal (Fed) ofrecerá este miércoles una nueva decisión sobre los tipos de interés, para la que los analistas esperan ampliamente una subida de 25 puntos básicos, a la que la herramienta FedWatch de CME otorga un 85% de probabilidad, y que podría poner fin a la serie de incrementos en los tipos llevada a cabo por el banco central estadounidense para controlar la inflación.
Los analistas de Danske Bank se encuentran entre los que esperan una subida del 0,25%, lo que dejaría los tipos de interés en la horquilla comprendida entre el 5% y el 5,25%, un nivel en el que prevén que se mantendrá, al menos, hasta finales de año.
"Esperamos que la Fed realice una subida final del ciclo de endurecimiento llevando la tasa de fondos federales a 5,00-5,25%. Sin proyecciones actualizadas y los mercados ya descontando 25 pb antes de la reunión, el énfasis principal estará en la guía verbal de Powell", destacan.
Lo que ven "poco probable" es que el titular de la Fed, Jerome Powell, cierre la puerta a nuevas subidas, pero desde el banco esperan que "la postura de la política monetaria siga endureciéndose hacia el segundo semestre" incluso con los tipos nominales suspendidos. Esta postura, agregan, dará "espacio para que los mercados especulen con tasas más altas".
"Seguimos pensando que mantener las tasas en niveles modestamente restrictivos durante más tiempo logra el mejor equilibrio entre evitar un aterrizaje forzoso y garantizar que la inflación baje para siempre. Dado que la inflación del sector de servicios sigue siendo demasiado rápida, vemos poco espacio para una política más flexible en el corto plazo", señalan.
Silvia Dall’Angelo, economista senior de Federated Hermes, también apuesta por una subida de 25 pb, y considera que "ante la preocupación por la estabilidad financiera, es probable que la Fed haga una pausa tras su decisión de mayo", lo que permitiría a la entidad "evaluar el impacto del endurecimiento monetario en la economía real, que debería ser más significativo en esta fase, dados los típicos retrasos en el mecanismo de transmisión".
"Sin embargo, dado que la rigidez del mercado laboral sigue siendo una fuente de presiones inflacionistas, es probable que la Fed mantenga su tipo máximo durante más tiempo de lo que esperan actualmente los mercados financieros", destacan, aunque agrega que la Fed ha encontrado datos más consistentes con una inflación en camino al 2%, "lo que sugiere que el impacto de la anterior restricción monetaria se está extendiendo gradualmente a la economía real".
La visión de una subida más en los tipos de interés la comparte Danni Hewson, directora de análisis financiero de AJ Bell, quien señala que "la desaceleración de la economía da peso a la suposición de que la Reserva Federal podría estar en la cúspide de su último aumento de tasas en este ciclo, pero el mercado laboral en los EEUU todavía se ve bastante ajustado, a pesar de los recientes recortes de empleo".
Los analistas de Oxford Economics apuntan que "la gestión de riesgos podría justificar una pausa pronto porque los bancos están endureciendo los estándares crediticios, lo que reducirá el crecimiento. Esto haría parte del trabajo de la Fed".
"Mientras tanto, los mercados también están valorando los recortes de tasas pronto, lo que difiere de nuestra propia opinión de referencia de que el primer recorte no será hasta principios de 2024. Con la inflación todavía muy por encima del objetivo de inflación del 2% de la Fed, es poco probable que el banco central recorte los tipos tan pronto como los mercados anticipan porque querrá pruebas claras de que ha quebrado la inflación", añaden.
Alguno de los integrantes de la Fed también se mostró partidario de un último aumento, como el presidente del Banco de la Reserva Federal de Atlanta, Raphael Bostic, quien aseguró que un alza de 25 pb "debería ser suficiente" para que el organismo de "un paso atrás" y evalúe la evolución de la economía y la inflación.
Sin embargo, algunos esperan que las subidas en los tipos de interés hayan llegado ya a su fin, una opción a la que la herramienta FedWatch de CME otorga un 15% de probabilidad.
"Suponemos que la Fed ha terminado con el ciclo de subidas de tipos. Se trata de una apuesta arriesgada, ya que la Reserva Federal intenta ahora matar dos pájaros de un tiro con una sola política, pero con varias herramientas: volver a situar la inflación en su objetivo y garantizar la estabilidad financiera", destaca Vincent Chaigneau, responsable de análisis de Generali Investments.
Además, asegura que "los últimos acontecimientos sugieren que el tipo de interés oficial (límite superior del 5%) podría estar ya por encima del tipo neutral de estabilidad financiera , pero no está tan claro si ha alcanzado el tipo neutral económico", y considera que "en cualquier caso, el final del ciclo se ha alcanzado o está muy cerca".
Para los analistas de TD Securities, la parte más interesante de este cónclave monetario llegará tras la decisión sobre los tipos de interés, para la que esperan un incremento de 25 pb, cuando Powell tome el micrófono para ofrecer su conferencia, en la que los expertos buscarán pistas sobre los próximos movimientos del banco central.
"Anticipamos que la comunicación posterior a la reunión enfatizará que la desinflación ha estado evolucionando más lentamente de lo esperado y dejará abierta la posibilidad de un endurecimiento adicional de la política, y reconocerá el entorno económico más incierto, especialmente con respecto a las condiciones crediticias, y continuará enfatizando fuertemente la dependencia de datos para las próximas reuniones", concluyen.
Michael Hewson, analista jefe de mercado en CMC Markets UK, también esperan una aumento de 25 pb, y agrega que "el principal desafío que enfrenta Powell es mantener abiertas sus opciones sobre futuros movimientos", aunque ve "poco probable que se retracte de su opinión de que no habrá recortes de tasas este año".
"Si bien algunos de los datos recientes de fabricación han mostrado signos crecientes de desinflación, no se puede decir lo mismo en la misma medida en los precios de los servicios y los alimentos. Es probable que esto atenúe cualquier tipo de orientación que los funcionarios de la Fed se dignen a ofrecer tras la decisión de esta semana", considera.