Dow Jones: -0,02%; SP 500: +0,02%; Nasdaq: +0,13%
Wall Street ha cerrado este jueves con signo mixto (Dow Jones: -0,02%; SP 500: +0,02%; Nasdaq: +0,13%). Los inversores tienen la vista puesta en el Informe de Empleo que se publicará este viernes y que es un punto clave para la política monetaria del país. El consenso espera la creación de 180.000 empleo. Esta jornada, se han publicado 269.000 peticiones de desempleo, por encima de las 263.000 esperadas.
"Hemos tenido algo de volatilidad en esta jornada", señala Scott Brown, economista jefe de Raymond James, que espera que la economía de EEUU haya añadido 150.000 puestos de trabajo durante el mes pasado. "Las empresas han sido más cautelosas después del Brexit y esperan las elecciones de noviembre", añade.
Lea también: El Ibex 35 rompe la racha bajista aupado por el Banco de Inglaterra
Los inversores esperan que el Departamento de Trabajo informe el viernes de la creación de 180.000 empleos
El índice Dow Jones ha sido el único que ha cerrado con pérdidas, empujado por Walt Disney (que ha caído un 0,97% hasta los 95,16 dólares) y por Home Depot (ha cerrado con una caída del 0,72% hasta los 136,07 dólares). Por su parte, el S&P 500 ha cerrado con una leve ganancia del 0,02%. Las mayores subidas las ha registrado el Nasdaq, que ha subido un 0,13%.
Por otro lado, el precio del petróleo ha seguido con el rebote que comenzó el miércoles después de tocar mínimos anuales. Este jueves, el precio del barril West Texas, de referencia en EEUU, ha subido un 2,35% hasta los 41,79 dólares, mientras que el barril de Brent ha avanzado un 2,53%, hasta los 44,19 dólares.
LOS DATOS DE PARO SEMANAL, POR ENCIMA DE LO ESPERADO
Los inversores han conocido los datos de peticiones semanales de desempleo, que han subido en 3.000 hasta las 269.000, elevándose así hasta el nivel más alto registrado desde finales de junio. No obstante, según recoge Marketwatch, pese al aumento el número total de solicitudes se mantienen muy por debajo del pico de 277.000 que marcaron a mediados del mes de junio. Los analistas esperaban un total de de 263.000 peticiones en la semana que se extiende del 24 de julio al 30 de julio.
Sin embargo, la gran cita semanal llega este viernes con la publicación del Informe de Empleo del Departamento de Trabajo de EEUU correspondiente al mes de julio. El consenso espera la creación de 180.000 empleos y que la tasa de paro se mantenga en el 4,9%.
Este jueves se han conocido los 269.000 peticiones de desempleo, por encima de las 263.000 esperadas
Este informe es clave para la Reserva Federal de EEUU (Fed) y su intención de subir los tipos de interés este año, posiblemente en septiembre. Si estos datos son favorables, la subida de tipos podría ser algo más que un especulación de los analistas y convertirse en realidad, ya que la incertidumbre creada por la salida del Reino Unido de la Unión Europea parece que se ha disipado.
BoE Y LA BAJADA DE TIPOS
En el otro lado de la balanza está el Banco de Inglaterra, que este jueves ha anunciado que baja los tipos al 0,25% desde el 0,5%. Pero no sólo eso, también ha ampliado su programa de estímulos. Las bolsas europeas han celebrado esta decisión y han cerrado todas con ganancias.
El Banco de Inglaterra también ha elevado su programa de compra de activos hasta 435.000 millones de libras desde los anteriores 375.000 millones de libras, y además otra novedad importante es que el BoE ha anunciado que a partir de ahora comprará bonos corporativos por valor de 10.000 millones de libras; y también un nuevo Term Funding Scheme (Esquema de Financiación) para "reforzar la transmisión del recorte de tipos" a la economía real.
OTROS MERCADOS
Los futuros sobre el petróleo West Texas suben 2,35% hasta los 41,79 dólares
El precio de los bonos estadounidenses a 10 años sube un 0,34% y su rentabilidad baja un 1,508%
El euro cae 0,2%, hasta 1,1127 dólares.
Lee además:
Adidas incrementa sus beneficios un 74,7% respecto al mismo periodo de 2015
Así reacciona la libra contra el euro y contra el dólar al recorte de tipos por parte del BoE
La caída de las reservas de divisas deja poco margen de maniobra al Banco de Inglaterra