Ha obligado a sus rivales a consolidarse y se ha quitado de en medio a Ono y Jazztel
Movistar Fusión ha pasado factura al negocio de las telecomunicaciones en España. El sector se ha visto obligado a converger en fijo-móvil y a experimentar una fuerte consolidación con la compra de Ono y Jazztel, mientras que el precio y los ingresos medios por usuario se han desplomado.
Con su estrategia de Fusión, Movistar quería frenar la pérdida de clientes y forzar la consolidación, algo que le ha permitido atajar la fuga de abonados en el fijo, pero no en el segmento móvil.
LOS RESULTADOS DE FUSIÓN, A EXAMEN
Según datos de la consultora Oliver Wyman consultados por Expansión, Telefónica, que se ha dejado cinco puntos de cuota de mercado de banda ancha en los 21 meses anteriores al lanzamiento de Fusión, sólo ha perdido un punto adicional, hasta el 47%, en los 21 meses siguientes.
No obstante, en el segmento móvil, Movistar apenas ha mejorado: ha perdido 2,29 millones de líneas y su cuota se ha reducido en 3,7 puntos, hasta el 33%.
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