Aseguran que la dirección de IU trabaja en 'completa contradicción' con su partido
El Partido Comunista de Madrid (PCM) ha decidido romper sus vínculos con Izquierda Unida después de que Comisión Ejecutiva asegurara que deben “apostar por la confluencia y la construcción de proyectos políticos de unidad popular”. Además, los comunistas concluyen que la dirección de IU en Madrid “ha marcado unas líneas que entran en completa contradicción con lo aprobado por la dirección federal y por el propio PCE”.
El escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid han dejado profundamente tocado a IU en su imagen pública
La decisión del PC de Madrid está muy vinculada al escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid. El partido asegura que el caso dejó al referente electoral (IU) "profundamente tocado en su imagen pública", y ante ello la dirección federal y el PCE "pusieron en marcha mecanismos de investigación que arrojaron como conclusión la existencia de determinadas responsabilidades políticas que a día de hoy aún no se han cumplido", según recoge Servimedia.
Lea también: PSOE, UGT y CC OO sabían de la existencia de las tarjetas black de Caja Madrid
El sector comunista considera que esa situación ha generado "desánimo en la militancia y el ahondamiento en una fractura política cada vez más grave que puede acabar en una auténtica diáspora".
LA APUESTA POR GANEMOS Y EL 'FRENTE POPULAR'
Según destaca la formación en su comunicado, "no reconocen" a la actual dirección de IU y aseguran apostar "sin ambages y con contundencia por mantener la participación en los espacios de convergencia como Ganemos Madrid y otros espacios de confluencia similares, en línea y coherencia con lo aprobado por los órganos federales del PCE e Izquierda Unida".
En el centro de la polémica también se encuentra Tania Sánchez, quien tras conocerse las supuestas irregularidades cometidas por su hermano y el ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid han generado grandes tensiones en el seno de Izquierda Unida Madrid y podría terminar por fracturar todo el partido.
Lee además:
Garzón se ve como el Tsipras español y asegura que 'la política del tamayazo sigue viva'