Alemania conquista América y se alza con su cuarta corona mundial

Gracias al gran fútbol desplegado por Alemania y el decisivo gol de Goëtze, los pupilos de Joachim Low acabaron por fin con la maldición de los europeos en Sudamérica. Anteriormente se había dicho que las condiciones climáticas o el mayoritario apoyo de la grada habían sido determinantes para que ningún equipo del viejo continente se alzara con la copa fuera de allí.

De los cuatro mundiales disputados en Sudamérica, hasta ahora todos habían sido ganados por el equipo anfitrión o por países vecinos. De este modo se iguala la estadística con Europa, donde nueve de los diez mundiales disputados fueron ganados por europeos, salvo la edición de Suecia 58, que se llevó el Brasil de un jovencísimo Pelé.

NEUER: "TODA ALEMANIA ES CAMPEONA"

Los alemanes se mostraron exultantes tras el pitido final. Neuer declaró "Toda Alemania es campeona", tras ser elegido el mejor portero del torneo. Por su parte Lahm, destacó el trabajo en conjunto. "Da totalmente lo mismo si tenemos los mejores jugadores individuales. Uno tiene que tener el mejor equipo".

Esta fue una de las claves de la victoria final. Mientras que en los demás equipos se puede encontrar un referente claro, en Alemania no hay un único exponente. Es el triunfo del equipo sobre la individualidad. Esta máquina bien engrasada es el fruto del trabajo del técnico Joachim Löw, quien asumió el mando de la selección tras la dolorosa eliminación del Mundial de 2006, celebrado precisamente en Alemania, y desde entonces le ha impuesto su estilo a un equipo que se caracteriza por su dinamismo y su efectividad.

LA GENERACIÓN DEL 2006 YA TIENE SU CORONA

En la final de la Liga de Campeones 2013, entre Bayern Múnich y Borussia Dortmund, nada menos que 26 jugadores de ambos planteles eran producto del sistema de academias y elegibles para representar a Alemania.

La perfecta maquina alemana tiene por fin el premio a su insistencia y a su buen trabajo durante los doce últimos años. Este es el tiempo que han tardado en repetir una final del Mundial. En 2002 la perdieron contra Brasil, pero se tomaron la revancha ante el anfitrión de esta copa del mundo endosándole un humillante 1-7.

En el siguiente torneo, la Eurocopa de 2004, llegó el necesario relevo generacional tras una prematura eliminación en primera fase. Ahí comenzó a gestarse la Alemania campeona de este año. En 2006 llegaron a las semifinales de su Mundial y en 2008 le disputaron la Eurocopa a España.

El pasado Mundial llegaron de nuevo a semifinales, pero otra vez España, y un testarazo para la historia de Puyol, les apartaron de la final soñada. Volvieron a quedarse a las puertas de la final en la Euro de 2012 y por fin en esta copa del mundo, después de rondar tantas veces la gloria, se impusieron a Argentina en la prórroga.

J.A.M.