La gran cuestión para el dólar no es si la Fed subirá tipos si no cuándo lo hará
La gran semana de los bancos centrales ha arrancado con una calma tensa planeando sobre el mercado de las divisas. Nada que ver con la excitación vista en el cierre de la semana anterior, cuando el dólar protagonizó un rally impulsado por los buenos datos de inflación en EEUU. El billete verde ha operado a la baja o se ha mantenido sin cambios frente a sus principales rivales, dejando al Euro/Dólar por encima de importantes niveles de soporte.
El índice del dólar de Bloomberg -que sigue el desempeño de la divisa contra una cesta de 10 monedas mundiales- ha retrocedido un 0,2% en el inicio de la semana, desde que el pasado 16 de septiembre alcanzó su nivel más alto desde el 29 de julio. En su cruce contra el euro, la divisa de EEUU ha aguantado el importante nivel de soporte en los 1,1145/20 dólares y también ha dejado un ligero rebote en la libra, mientras, contra el yen, ha seguido su senda a la baja.
La escasa acción en las divisas puede explicarse, tal y como comenta Kathy Lien, fundadora de BK Asset Management, porque los inversores están esperando el momento adecuado antes de la reunión de la Reserva Federal (Fed) del miércoles, pero a la vez están agotando su paciencia a la hora de mantener sus posiciones en el dólar, dada la escasa probabilidad de que haya cambios en el precio del dinero por parte del banco central. “En este punto, lo realmente importante ya no es si habrá recorte de tipos -que los habrá-, si no cuándo volverá la Fed a la senda de la normalización de su política monetaria y cómo de comprometidos están en que el primer paso se dé antes de final de año”, explica Lien, y esto lo sabremos tras el discurso de la presidente del banco central, Janet Yellen.
Los inversores están esperando el momento adecuado antes de la reunión de la Reserva Federal (Fed) del miércoles, pero a la vez están agotando su paciencia a la hora de mantener sus posiciones en el dólar
Adrián Aquaro, fundador de Trader College, recuerda que el consenso de los miembros del comité de política monetaria de la Fed (el FOMC) apunta a aumentar tipos en forma paulatina, pero la realidad es que las decisiones se han ido demorando, “y ese modesto incremento del 0,25 al 0,5% de diciembre de 2015 luce como aislado, y sin efecto alguno en la economía”.
“¿Qué produjo dicha alza?”, se pregunta Aquaro. “En los hechos, nada”, explica. “Apenas días después de ese paso cayó la bolsa de China -es cierto que por una burbuja que ya había estallado en agosto y que tuvo su segunda explosión el primer día hábil de este año-, y luego los mercados comenzaron a mirar a Reino Unido, que finalmente terminó decidiendo irse de la Unión Europea”, rememora el experto. “Todo ello, más los datos propios de Estados Unidos, que no convencen, se conjugó para que en estos primeros 9 meses del año, el dólar haya lucido más expuesto a los vaivenes de sus monedas rivales que dominando la escena”.
“No habrá cambios el miércoles, y si los hay, puede que se produzcan en diciembre. Muy poco para la primera economía del mundo”, concluye el analista de divisas.
¿Y EL BOJ?
Del otro banco central en la liza esta semana, el Banco de Japón (BoJ), cree el fundador de Trader College que “no cambiará sus tipos de interés, que ahora mismo son negativos, y probablemente no aumente su plan de estímulo a la economía”. “Es muy probable entonces que el yen vuelva a crecer cuando, a una hora no definida, hable el Gobernador Kuroda. Sin embargo, como suele suceder, el yen se mostrará algo volátil para quedar sin muchos cambios al final de la jornada”, afirma el analista. “Al fin y al cabo, el yen quedará durante el resto del año en un rango que difícilmente quiebre la zona de 100 a 108”, asegura Aquaro.
El yen se mostrará algo volátil para quedar sin muchos cambios al final de la jornada
Sin embargo, Kathy Lien sí deja la puerta abierta a que el BoJ pueda sorprender a los inversores, ya que la autoridad monetaria nipona está considerando claramente “profundizar en el terreno de los tipos de interés negativos”. Para la analista esta sería una inesperada flexibilización de la política económica del banco central que mandaría al yen a la baja. Pero, si por el contrario, “el banco central sigue con las manos atadas otro mes más, el yen podría subir en señal de decepción”, indica Lien.
LA LIBRA REBOTA MODESTAMENTE: ¿SÓLO POR LA DEBILIAD DEL DÓLAR?
El otro cruce que copa la atención en el terreno de las divisas es la Libra/Dólar. El rebote en el cruce del lunes bien podría atribuirse a la debilidad en la divisa de EEUU, pero el informe semanal de posicionamiento de los operadores de divisas (el COT, por sus siglas en inglés) muestra que por tercera semana consecutiva las apuestas bajistas contra la libra han experimentado una bajada.
Por tercera semana consecutiva las apuestas bajistas contra la libra han experimentado una bajada
Explican los expertos de Rabobank que este cambio se ha visto alentado por la mejora de los datos económicos en Reino Unido. “Dicho esto, el tono pasivo mostrado por el Banco de Inglaterra la semana pasada pueden dificultar que la tendencia se acabe por revertir definitivamente”.
En cualquier caso, desde Commerzbank, Karen Jones, experta en divisas para la entidad insiste en que el precio objetivo para la Libra/Dólar sigue siendo la banda de los 1,2797/50 dólares, el mínimo de julio y soporte de Fibonacci de corto plazo y mantiene su perspectiva negativa de largo plazo.