El euro se depreció un 10% entre junio de 2014 y mayo de 2015
La utilización del euro en préstamos internacionales en se incrementó en 2014 y a principios de este año, según datos del Banco Central Europeo (BCE). A pesar de la mayor demanda de euros para operaciones de financiación, la divisa se depreció un 10% en los 12 meses previos a mayo de 2015.
La proporción del euro en las reservas internacionales de divisas que mantienen los bancos centrales permaneció estable entre junio de 2014 y mayo de 2015, explica en un comunicado el BCE en el informe 'The international role of the euro' (el rol internacional del euro). Sin embargo, la divisa europea se usó más para préstamos internacionales y, sin embargo, el tipo de cambio nominal con sus pares se depreció 10 puntos.
Este abaratamiento de la moneda ha afectado a los indicadores utilizados para valorar el uso del euro a nivel internacional. No obstante, con tipos de cambio constantes, se observa una recuperación del uso del euro frente al periodo entre junio de 2013 y mayo de 2014, cuando se utilizó menos la divisa a consecuencia de la crisis de deuda.
El euro se depreció un 10% entre junio de 2014 y mayo de 2015 frente al resto de divisas internacionales
“Uno de los efectos más evidentes de la depreciación del euro durante el período analizado fue que la proporción que representa el euro, en términos nominales, en las tenencias mundiales de reservas internacionales se redujo un 2,2%, hasta el 22,2%, en 2014”, explica el comunicado del BCE. Pero si se elimina el efecto del tipo de cambio, la proporción se mantuvo estable.
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IMPACTO DE LAS POLÍTICAS MONETARIAS
“Pese al impacto de las divergencias observadas a escala internacional en los ciclos de política monetaria, los gestores de divisas, en promedio, no estuvieron activamente reajustando sus carteras hacia fuera de la zona del euro”, señala Benoit Coeure. Es decir, aunque las diferentes políticas monetarias que mantienen los bancos centrales afecta a la oferta y demanda de divisas, no ha habido una huida hacia otras monedas desde el euro.
En un entorno marcado por los bajos tipos de interés y que en la zona euro están en descenso, explica el BCE, los demandantes de préstamos internacionales usaron en mayor medida el euro como moneda de financiación. “La proporción que representó el euro en las emisiones internacionales de deuda se incrementó nueve puntos porcentuales -hasta situarse casi en el 30% en el primer trimestre de 2015- en comparación con el mismo trimestre de 2014”.
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