La moneda comunitaria sigue presa de las ventas
El euro ha quebrado el nivel de 1,09 dólares por primera vez desde mayo de 2017 y ha registrado un nuevo mínimo anual en 1,0885 dólares. La moneda comunitaria sigue bajo presión por la galopante ralentización económica de la Eurozona, que se ceba especialmente en la economía alemana.
Precisamente, informaciones publicadas por 'Reuters' de que los dos principales institutos germanos de estudios económicos rebajarán sus previsiones de crecimiento sobre la primera potencia de la zona euro han dinamitado a la moneda. Concretamente, esperan que la economía alemana crezca un 0,5% este año y el Gobierno alemán se basa en las proyecciones de estas instituciones para elaborar las suyas propias.
Según la noticia, estas revisiones a la baja reflejan las crecientes preocupaciones de una desaceleración en Alemania provocada, principalmente por una recesión en el sector manufacturero que depende de las exportaciones. El atasco en la locomotora de Europa podría lastrar la economía de la zona euro en general.
Estos organismos habían dicho en abril que esperaban un crecimiento del 0,8% este año y del 1,8% en 2020; ahora, prevén una expansión del 1,4% en 2021, dijo una fuente. Se espera que presenten sus nuevas previsiones de crecimiento el miércoles.
Mientras tanto, la inflación anual alemana se desaceleró inesperadamente por tercer mes consecutivo en septiembre, según mostraron los datos de este lunes.
La moneda europea también se ha visto arrastrada por el dólar, que inicia la semana -y finaliza el mes- con un claro tinte alcista. "El euro insiste en sus mínimos de dos años y medio, y apuntando más a la baja", indica Adrián Aquaro, analista de Trader College.
En cuanto al resto de monedas, la libra esterlina está “desinflada” ante las desventuras del Brexit, el yen lentamente va cediendo fuerza aunque aún se mantiene con ciertos signos de firmeza, y las monedas relacionadas con las materias primas también están débiles.