El Nikkei cae más de un 3% y Softbank prosigue con su sufrimiento
Las bolsas asiáticas han dejado agudas pérdidas este jueves, después de los nuevos mínimos anuales de Wall Street, cuando los inversores decidieron vender de manera agresiva tras conocer la decisión de la Fed de volver a subir los tipos de interés dos veces más en 2019.
"¿Cómo una subida tan acomodaticia se ha podido interpretar como tan agresiva?", se preguntan los expertos del BNY Mellon. La Fed decidió seguir adelante con la cuarta subida de los intereses de 2018 (la novena desde que comenzó el ciclo de subidas en 2015), que ha elevado los intereses hasta el 2,25%-2,50%, justo la parte baja de la horquilla del 2,5% al 3,5% y que el banco central considera neutral para los tipos. Pero el quid de la cuestión radica, para los expertos de Danske Bank, en que el mercado esperaba, como mucho, que redujeran sus planes de subidas a una más en 2019. En cambio, las bolsas deben acomodarse a dos incrementos de cara al año próximo.
Así, las bolsas asiáticas se tiñen de rojo con caídas del 3% en el Nikkei nipón, que ha recortado marginalmente al cierre, y de más del 2,75% en el Topix, que vive su propia dosis de drama tras la emisión pública inicial de valores de la división móvil de Softbank. El valor se ha dejado más de un 3,5% este jueves, después de que Siftbank Corp cayera un 8% en la sesión anterior.
En la China continental, Shanghai y Shenzhen han cedido un 0,69%, la primera, mientras la segunda ha acabado plana, lastradas por los bancos del gigante asiático, que han recortado entre un 1% y un 2%. El banco central chino anunció su decisión de mantener estables las tasas de endeudamiento a corto plazo el jueves, un día después de revelar las medidas para alentar los préstamos a pequeñas empresas. El índice Hang Seng de Hong Kong ha perdido un 1,13% y las acciones de HSBC que cotizan en Hong Kong han cedido un 0,86 por ciento.
El Kospi surcoreano ha retrocedido un 0,9%, mientras Tailandia, Malasia y Singapur dejan retrocesos de entre un 0,4% y un 0,7%. En el Pacífico, el ASX200 australiano pierde un 1,34% y el NZX50 de Nueva Zelanda gana un marginal 0,11%.