Shanghai y Shenzhen acaban con caídas marginales
La sesión asiática ha estado marcada por la cautela de los inversores, que esperaban la publicación de los datos de la balanza comercial de China del mes de marzo. El rojo ha dominado la sesión en los parqués del gigante asiático, que han remontado al cierre después de que las exportaciones del país han remontado fuertemente en el tercer mes de 2019.
Las exportaciones han doblado las expectativas se han catapultado hasta el 14,2%, frente al 7,3% esperado. El buen dato supera los desplomes de más de un 20% de meses anteriores, pero el contrapunto lo ponen las importaciones, que han cedido hasta el -7,6%, frente al -1,3% esperado, lo que sugiere menos demanda interna en al segunda economía mundial. La balanza comercial de China en marzo se ha ampliado a 32.640 millones de dólares, frente a los 7.050 millones de dólares esperado y los 4.080 millones de dólares del mes anterior.
Con todo, Shanghai se ha dejado un 0,04% y Shenzhen un 0,24%, mientras el Hong Seng de Hong Kong lo ha hecho un 0,23%. Los inversores también han decidido mantenerse a la espera antes del arranque de la temporada de resultados que inauguran JP Morgan y Wells Fargo en EEUU. Por otra parte, los analistas también indican que los avances de las negociaciones comerciales entre China y EEUU seguirán marcando el compás.
El Nikkei ha acabado en el verde, con un avance de un 0,3%, el Kospi surcoreano ha subido un 0,41 y en el Pacífico, Australia ha añadido un 0,85%, mientras Nueva Zelanda lo ha hecho un 0,02%. Los parqués del Sudeste asiático cierran en el rojo, menos Malasia que sube un 0,20%.