Trump, ¿insolvente? Deutsche Bank le negó un préstamo para su campaña en 2016

Así lo asegura The New York Times este lunes, asegurando que la solicitud de Trump fue examinada detenidamente por los principales miembros del banco germano, incluido su consejero delegado, Christian Sewing, que por aquel entonces se encargaba del negocio dedicado a la gestión del patrimonio de la entidad.

Finalmente, los altos cargos del Deutsche llegaron a la conclusión de que otorgarle un préstamo a Trump era demasiado arriesgado debido a la retórica de su campaña, que además podía acabar dañando la reputación de la firma financiera alemana.

Otro de los riesgos que sopesaron fue la posibilidad de que el banco tuviera que incautar algunos de los activos del actual presidente de EEUU en caso de que se declarase insolvente y fuera incapaz de afrontar el plazo para pagar el préstamo.

¿Para qué necesitaba Trump concretamente este préstamo? La información apunta a que quería financiar la renovación de un campo de golf situado en Turnberry, Escocia. Sin embargo, la portavoz de la Organización Trump, Amanda Miller, ha afirmado al NYT que "la historia es absolutamente falsa" puesto que "compramos la propiedad sin financiación al poner sobre la mesa millones de dólares de nuestro propio bolsillo".

Pese a todo, cabe recordar la relación entre Deutsche y Trump, que se remonta a años atrás, cuando el magnate recurrió al negocio de banca privada de los alemanes para financiar su rascacielos de Chicago. A su vez, en los años 90 Trump dejó a deber deudas en varios bancos estadounidenses por una suma cercana a los 3.400 millones de dólares cuando coqueteó con la quiebra de su negocio.

A raíz de esto, el ahora presidente tuvo que recurrir a otras vías de financiación para sus proyectos, lo que a su vez coincidió con la expansión del Deutsche Bank uniendo el camino de ambos... ¿hasta ahora?