Intentará contactar esta tarde con Theresa May, mientras el Gobierno multiplica las gestiones para llegar a un acuerdo
MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha llamado este martes por la mañana al presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, para advertirle de que votará 'no' al acuerdo de salida de Reino Unido de la UE si no recoge la posición española en la cuestión de Gibraltar, han informado este martes a Europa Press fuentes gubernamentales.
Sánchez tiene previsto también hablar a primera hora de la tarde con el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, e intentará contactar por la tarde con la primera ministra británica, Theresa May, han señalado otras fuentes del Ejecutivo, que han adelantado que Juncker se ha mostrado "comprensivo" con la posición española.
Según estas fuentes, en las últimas horas se han multiplicado los contactos a todos los niveles para intentar buscar una solución. El Gobierno español considera que su petición no es nada desorbitada, teniendo en cuenta que es la que está recogida en las orientaciones del Consejo Europeo para negociar el Brexit. Además, sostienen que el Gobierno español está más que legitimado para pedir este cambio, porque ha tenido una posición muy constructiva durante todas las negociaciones.
El Gobierno de Sánchez, por boca primero del ministro de Exteriores, Josep Borrell, ya había advertido de que condicionará su visto bueno al acuerdo de divorcio negociado a que se modifique el artículo 184 del Tratado de Retirada, en el que se apunta que la UE y Reino Unido deberán negociar de manera "expeditiva" las condiciones de la nueva relación, sin mencionar la situación particular de Gibraltar.
Lo que el Ejecutivo español quiere es que tanto en el acuerdo de salida --que es un Tratado-- como en la declaración política sobre la relación posterior entre la UE y Reino Unido quede claro que el futuro de Gibraltar se decide por una negociación entre Reino Unido y España.
"Si el domingo 25 --cuando se ha convocado una cumbre extraordinaria para aprobar el acuerdo-- va el acuerdo de retirada y la declaración política de futuro en los términos que está ahora mismo, España votará que no", ha avanzado Sánchez a primera hora de este martes en la inauguración del foro empresarial 'The Spain Summit 2018', organizado por 'The Economist'.
España es el único país que ha condicionado la aprobación final del acuerdo de retirada a que sea modificado para dotarlo de mayor claridad jurídica respecto de que cualquier relación futura del bloque con el territorio de Gibraltar deberá pasar primero por el consentimiento español.
"Los sorprendidos somos nosotros", ha indicado Sánchez en ese foro, donde se ha quejado de que, mientras el Gobierno español ha mantenido en los consejos europeos una actitud "absolutamente constructiva y proeuropea", en el acuerdo de retirada del Reino Unido y la declaración política futura "no se aclara algo que es fundamental desde el punto de vista de identidad, de la esencia del país".
El Gobierno español asegura que se encontró con ese artículo a última hora, cuando ya lo conocía el Gobierno británico --y el de Gibraltar--, y que fue la Abogacía del Estado quien avisó de los posibles riesgos. Si se introdujo este artículo en el último momento, alegan las fuentes, puede introducirse otro cambio ahora.
Con todo, tanto en Madrid como en Bruselas hay esperanza de que se pueda llegar a un acuerdo, según fuentes españolas, porque los interlocutores a distintos niveles no han encontrado la petición descabellada. Fuentes europeas añaden que ahora hay que encontrar una fórmula que permita ponerla en el papel.
En la cumbre de este domingo está previsto que los jefes de Estado y de Gobierno hagan una "adopción" del acuerdo y las decisiones del Consejo Europeo son siempre por unanimidad. En cambio, la aprobación formal del Tratado, que aún se demorará unos meses, puede hacerse por mayoría cualificada de los Gobiernos europeos.
Con todo, las fuentes gubernamentales consultadas creen que políticamente no sería aceptable que el acuerdo para el Brexit saliese adelante sin unanimidad.
LA COMISIÓN, AL TANTO DE LA QUEJA
La Comisión Europea ha afirmado que está "al tanto" de las preocupaciones de España sobre la falta de claridad jurídica sobre Gibraltar en el acuerdo de salida de Reino Unido de la UE y considera que la posición del bloque está clara en sus directrices de negociación, si bien mantiene la incógnita sobre si cree posible reabrir el pacto para modificarlo como reclama España.
El portavoz jefe del Ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas, ha recordado que las directrices de negociación adoptadas en abril de 2017 por los Veintisiete establecen que ningún acuerdo que negocien la Unión Europea y Reino Unido sobre la relación futura podrá aplicarse a Gibraltar si no es con el acuerdo previo de España.
España también aspira a que la misma claridad en el lenguaje quede plasmado en la declaración política que sentará las bases para negociar el marco de la relación futura y cuya redacción están negociando ahora la UE y Reino Unido.
Bruselas ha indicado que se están produciendo contactos sobre la declaración política y por tanto su redacción está "en curso de negociación", por lo que rechaza pronunciarse sobre su contenido y subraya que es una semana en la que "todo evoluciona". "La próxima etapa será el domingo", ha zanjado el portavoz.
Entre los contactos previstos destaca una reunión el miércoles entre el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y la primera ministra de Reino Unido, Theresa May, para abordar los preparativos de la cumbre.