La causa estudia posibles delitos de prevaricación, corrupción y tráfico de influencias
El primer ministro de Portugal, Antonio Costa, ha presentado su dimisión este martes después de que la Fiscalía del país informara de que lo investiga como parte de una causa por posibles delitos de prevaricación, corrupción y tráfico de influencias y política relacionados con varias concesiones públicas.
El Ministerio Público inspeccionó como parte de este operativo un total de 17 viviendas y otros 20 inmuebles, entre los que se incluyen los espacios utilizados por el jefe de Gabinete del primer ministro, el Ministerio de Medio Ambiente y Acción Climática, el Ministerio de Infraestructuras y la Secretaría de Estado de Energía y Clima, entre otros.
En concreto, la investigación se centra en las concesiones de exploración de litio en Romano (Montalegre) y do Barroso (Boticas), un proyecto para una planta de producción de energía de hidrógeno en Sines y un proyecto de construcción del centro de datos desarrollado en la Zona Industrial y Logística de la misma zona.
Costa aseguró a la hora de presentar su dimisión que "la dignidad de las funciones del primer ministro no es compatible con ninguna sospecha sobre su integridad, su buena conducta y, menos aún, con la sospecha de la comisión de cualquier acto delictivo".
"Me sorprendió hoy la información, confirmada oficialmente por la oficina de prensa de la Procuraduría General de la República, de que ya ha habido o habrá una causa penal en mi contra", ha agregado.
Además, ha asegurado que se encuentra "totalmente disponible para colaborar con la justicia en todo lo que considere necesario para establecer toda la verdad, sea cual sea el asunto".