La Mesa del Congreso acepta los recursos contra su tramitación
La Mesa del Congreso, en la que tienen mayoría PP y Ciudadanos, ha acordado este lunes excluir la enmienda del PSOE para anular el veto irrevocable del Senado al techo de gasto a través de una una ley de medidas contra la violencia machista, una vía que iba a permitir asegurar la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Tanto el PP como Ciudadanos habían presentado sendos recursos pidiendo anular esa enmienda al considerarla un "fraude" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya que se refería a un asunto ajeno al objeto de la proposición de ley, en las que además recordaban que ya está en tramitación una iniciativa legislativa específica sobre el veto del Senado a la senda de déficit. Estos recursos han sido aceptados por la Mesa, lo que automáticamente supone el bloqueo de la tramitación de la enmienda.
Tanto el PP como Ciudadanos consideran este atajo como "fraude" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez
PSOE y Unidos Podemos han protestado, alegando que la Mesa del Congreso no tiene competencias para corregir a la Mesa de la Comisión de Justicia, donde los socialistas tienen la mayoría y que ya había aceptado tramitar la controvertida enmienda. Sin embargo, la Mesa del Congreso, con los votos de PP y Ciudadanos, ha decidido corregir a la Mesa de la Comisión de Justicia y ha sacado de la tramitación la mencionada enmienda.
Tal y como ha justificado la presidenta del Congreso y de la Mesa, Ana Pator, en una rueda de prensa tras la reunión, "estamos ante una situación inédita, en la que hay dos textos idénticos, y digo idénticos, tramitándose a la vez, lo que abre la posibilidad de alcanzar resultados contradictorios, y eso provocaría inseguridad jurídica". Sin embargo, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha acusado al PP y a Ciudadanos "secuestrar la voluntad del Parlamento y de la soberanía popular" impidiendo que se pueda cumplir con la tramitación de unas nuevas cuentas públicas, y ha advertido de que, a pesar de esta "pinza", se mantiene la hoja de ruta de aprobar unos nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019 a finales de noviembre o principios de diciembre y, como paso previo, se remitirá a Bruselas a mediados de octubre el plan presupuestario.
El vicesecretario general del PP, Javier Maroto, ha dicho en una entrevista en La Sexta que hasta ahora "nadie había intentado" sacar adelante una enmienda de estas características "de rondón, a oscuras", y a su juicio lo que ha hecho el PSOE "muestra cómo son sus ideas y el respeto que tiene por el Pacto de Estado contra la Violencia de Genero". Tal y como ha señalado, "el PP se opone a estos Presupuestos porque es momento de bajar impuestos. Toca hacerlo después de todo el esfuerzo que han hecho los españoles durante la crisis", ha remarcado.
La expectación en torno a la reunión de la Mesa del Congreso de este lunes era máxima, y no era para menos. La decisión que ha adoptado este órgano tras casi dos horas de reunión pone en cuestión el trámite para acelerar el cambio en la Ley de Estabilidad, necesario si el Gobierno quiere asegurarse de forma rápida la aprobación de los Presupuestos. Ahora todo se ha complicado, y eso que el PSOE ha intentado hasta el último momento que la enmienda siguiese adelante.
Pastor ha dicho al enterarse de que los socialistas habían planteado promover su reprobación si facilitaba que la Mesa tumbase su enmienda para sortear el veto irreversible del Senado a la senda de déficit, que el órgano de gobierno de la Cámara "no admite presiones". "Este es un órgano constitucional, la Mesa no permite y no admite las presiones", ha aseverado antes de la reunión de la Mesa del Congreso.
ACELERAR LOS PGE
El Gobierno se encuentra ahora con una nueva piedra en el camino, y sólo le queda esperar a que llegue el momento de votar la proposición de ley específica para cambiar la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que plantea anular el veto irreversible que puede imponer el Senado, donde el PP tiene mayoría, a la senda de déficit y el techo de gasto.
El PSOE ya intentó que esa proposición de ley, que presentó en agosto junto a Unidos Podemos, ERC y Compromís, fuera tramitada de forma exprés, pero PP y Ciudadanos unieron fuerzas en la Mesa del Congreso, donde suman mayoría, e impidieron que se le diera trámite por el procedimiento de urgencia y en lectura única, es decir, reduciendo todos los plazos a la mitad, y solventando su discusión en un único debate en el Pleno del Congreso.
Unidos Podemos está dispuesto a llevar al Tribunal Constitucional la decisión de la Mesa del Congreso
Ante esta decisión PSOE, Unidos Podemos, ERC y también el PNV recurrieron pidiendo a la Mesa que reconsiderara su decisión tras escuchar a la Junta de Portavoces, donde son más los grupos partidarios de esa tramitación rápida. La Mesa del Congreso aún tiene pendiente determinar si atiende o no ese recurso de reconsideración, aunque los de Pablo Iglesias no tienen previsto esperar.
De hecho, Unidos Podemos está dispuesto a llevar al Tribunal Constitucional la decisión de la Mesa del Congreso de tumbar la enmienda del PSOE. Así lo ha avanzado, según recoge Europa Press, la vicepresidenta cuarta del Congreso y diputada de la confederación, Gloria Elizo, a la salida de la reunión que ha mantenido este lunes el órgano de gobierno de la Cámara.
Elizo ha subrayado que su grupo parlamentario va a estudiar la posibilidad de recurrir al Alto Tribunal una decisión para la cual, ha dicho, "no tiene capacidad legislativa". Y es que, según ha apuntado, "no existe procedimiento legal" para que la Mesa del Congreso corrija a la Mesa de la Comisión de Justicia, donde los socialistas tienen la mayoría y ya aceptaron la semana pasada tramitar la controvertida enmienda. "No existe procedimiento legal que permita ningún tipo de doble instancia a lo que ya dijo la Comisión de Justicia", ha insistido.