El PP se ha abstenido al considerarla un "inexplicable regalo" a Sánchez
El Congreso de los Diputados ha rechazado la moción de censura contra el Gobierno de Pedro Sánchez, la segunda en su legislatura impulsada por Vox y que tenía a Ramón Tamames como candidato, y la sexta moción de censura de la vida democrática de España.
La moción sólo ha contado con el apoyo de 53 diputados, los 52 de Vox y el de Pablo Cambronero, del Grupo Mixto, ya que los demás partidos han votado no (201 votos negativos) y el PP se ha abstenido (91 abstenciones).
Este miércoles, el Congreso de los Diputados ha retomado el debate de la moción de censura. Una jornada que ha terminado, una vez concluidas las intervenciones, con la votación final de la candidatura de Ramón Tamames, que exigía mayoría absoluta.
En el caso de que la moción de censura hubiera prosperado, el Gobierno tendría que haber presentado su dimisión al Rey. El candidato se entendería investido de la confianza de la Cámara y el Rey le hubiera nombrado presidente del Gobierno. Sin embargo, al no haber sido aprobada por el Congreso, los diputados firmantes no podrán presentar otra durante el mismo período de sesiones.
La portavoz de los populares, Cuca Gamarra, ha defendido su abstención, dado que esta moción de censura es un "inexplicable regalo" de Vox a Sánchez. Como ha explicado, no van a votar a favor "por respeto a los españoles" y tampoco en contra "por respeto" a Tamames. "Podemos encontrar algunas coincidencias con el relato de Tamames, pero no es nuestro relato ni nuestro candidato ni nuestro proyecto". "España está esperando una alternativa, pero no es usted Tamames", ha añadido.
Tras la intervención de la portavoz del PP ha sido el turno del portavoz parlamentario del PSOE, Patxi López, quien ha acusado a Tamames de estar "poniendo su trayectoria al servicio de Vox, usted está endulzando el veneno". En su opinión, el PP "hoy se va a abstener porque su futuro depende de Vox". Y también se ha dirigido a Abascal: "Lo suyo fue toda una declaración de amor al PP: olvidemos todo, me arrepiento de lo que te dije, te quiero mucho".
Por su parte, Tamames ha destacado este miércoles que "esto no es una sesión parlamentaria, es un mitin preparatorio de las elecciones del 28 de mayo".
Pedro Sánchez también ha vuelto a intervenir en el debate para asegurar que en España "el apocalipsis no ha llegado ni se le espera", y que este "proyecto reformista de avances sociales que tiene como protagonista a la mayoría social de nuestro país, no solo ha sido capaz de resistir volcanes y guerras, sino que está fuerte para seguir avanzando".
La sesión del martes se abrió con la intervención del líder de Vox, Santiago Abascal, quien pidió "decoro" y que los diputados vayan vestidos "dignamente uniformados y con respeto". Además, aseguró que se trata de una moción de censura "muy seria", a pesar de que nace sin apenas posibilidad de salir adelante. "Esto es algo muy serio aunque lleven un montón de días intentando ridiculizarlo", dijo.
Abascal puso en duda la "capacidad de oposición" de los populares, dado que su líder, Alberto Núñez Feijóo, no estuvo presente. "Lamento no poder dirigirme hoy al autoproclamado líder de la oposición. Digo autoproclamado porque yo entiendo que para liderar la oposición sería bueno estar aquí y hacer oposición. O por lo menos una de ambas cosas".
Para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también tuvo palabras Abascal. Le definió como un "político caducado": "Digo que es usted un producto caducado pero también afirmo que hay muchas veces que esos productos aguantan demasiado tiempo en la nevera, y exactamente para eso hemos puesto en marcha esta moción de censura".
Para finalizar su intervención, Abascal afirmó que "sobran motivos para esta moción de censura" y remarcó la necesidad de terminar con una "legislatura suicida". Por ello, solicitó poner fin a la "legislatura del esperpento y del odio". "O elecciones inmediatas o medio año de este gobierno interminable", señaló en un discurso que duró 45 minutos.
Precisamente fue Sánchez el segundo en intervenir el martes. "Esta vez no es el candidato, se ha conformado con ser el presentador o telonero", lanzó al líder de Vox. "Esta moción estrambótica nos da la oportunidad de observar para qué sirve Vox: en las calles, agitación. En las tribunas, bronca. Y en todas partes, odio. Eso es lo que ustedes han planteado a la política española".
Así lo señaló el presidente del Gobierno, quien pidió a Abascal que "suba a la tribuna y mencione un solo logro de su partido, un cambio real. No puede hacerlo porque no existe". "Su proyecto de país es la nada más absoluta".
"¿Cuáles son las razones?" para presentar esta moción de censura, preguntó Sánchez, dando motivos por los que cree que no es por la economía, ni por la defensa de la Constitución, ni por Cataluña... "Es para frenar por cualquier medio las políticas del gobierno de coalición progresista", respondió. Unas políticas que Sánchez procedió a enumerar. "La España que hemos sido durante estos años con ustedes no hubiera sido posible", resumió.
Por todo ello, Sánchez dijo que se trata de "una moción de censura de tierra quemada, que no se define por lo que quiere construir, sino por lo que quiere destruir". "Hoy vamos a contrastar el proyecto de país de este gobierno de coalición progresista con la nada más absoluta con sus socios de la abstención. Ustedes van por una involución de 50 años ya, ese no es el futuro que necesita España. Por eso esta moción es coherente con lo que ustedes representan. Lo que ustedes han demostrado en esta cámara, ir contra la convivencia de los españoles", añadió.
Sánchez también atacó este martes a Feijóo y su partido y la decisión de abstenerse en esta moción de censura. "Al parecer ni le va ni le viene". "Lo que va a hacer el PP con esta abstención es un pago en diferido, pasando de un decente no a una indecente abstención". Y lanzó una advertencia: "Tengan cuidado, este negocio es de los que dejan mancha. Más pronto que tarde la ultraderecha vendrá a exigirles un segundo pago en diferido para saldar deudas".
En su intervención del martes, Tamames emplazó a los partidos a "un pacto para hacer posible que el país recupere una cierta concordia, paz y un entendimiento entre la mayoría de los españoles", apostando por "un cambio radical", volviendo a los principios de la Monarquía parlamentaria, de la "unidad nacional" y la "bandera" que comparten todos los españoles. No obstante, el candidato no hizo referencia durante su discurso a la petición de adelantar las elecciones.
El presidente del Gobierno, en respuesta al discurso de Tamames, expresó que encabezar la moción de censura "no ha sido la mejor idea que ha tenido en su vida", ya que supone "blanquear" a Vox.
Durante el debate del martes también intervino la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz.
Además, tuvieron turno de palabra Tomás Guitarte, de Teruel Existe, Isidro Martínez Oblanca, de Foro Asturias, José María Mazón, del Partido Regionalista de Cantabria, y Carlos García Adanero, todos integrantes del Grupo Mixto. A continuación hicieron uso de la palabra Mertxe Aizpurua, portavoz del Grupo EH-Bildu, Aitor Esteban, portavoz del Grupo EAJ-PNV, e Inés Arrimadas, portavoz del Grupo Ciudadanos. Por el Grupo Plural, participaron Néstor Rego, del Bloque Nacionalista Galego, Joan Baldoví, de Compromís, Íñigo Errejón, de Más País, Ferran Bel, del PdeCat, y Miriam Nogueras, de Junts per Catalunya.
En el debate del martes también fijaron posición Gabriel Rufián, portavoz del Grupo Republicano; Lucía Muñoz, Aina Vidal y José Luis Bueno Pinto, por el Grupo Confederal Unidas Podemos-En Comú Podem-Galicia en Común; e Iván Espinosa de los Monteros, portavoz del Grupo Vox.