Sin embargo, el delegado del Gobierno en Cataluña tomará medidas si obligan a los funcionarios a trabajar
El recién elegido como delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, ha asegurado que no actuará contra aquellos cargos electos que decidan trabajar el 6 de diciembre como medida de rechazo a la celebración del Día de la Constitución. "Si hablamos de funcionarios, la cosa cambia" ha aclarado, Millo.
El delegado del Gobierno ha hecho estas declaraciones en una entrevista en TV3, donde le han preguntado sobre las medidas que tomaría en el caso de que se repitiese la escena del pasado 12 de octubre, cuando algunos ayuntamientos gobernados por independentistas decidieron trabajar como rechazo a la fiesta nacional.
Enric Millo ha respondido que no quiere anticiparse a los hechos y que "ya se verá cuando llegue el día" y que "si un político quiere ir a trabajar, que lo haga". La respuesta de Millo choca con la opinión de su antecesora en el cargo, Llanos de Luna, quién acudió a los tribunales por la decisión del Ayuntamiento de Badalona de abrir sus puertas el Día de la Hispanidad. Aun así, el consistorio decidió saltarse la prohibición del Juzgado Contencioso-Administrativo 14 de Barcelona.
"En vez de instar a hacer cosas fuera de la ley, que genera conflicto, sería mejor sentarse y hablar"
MILLO APUESTA POR EL DIÁLOGO
Millo ha pedido que "en vez de instar a hacer cosas fuera de la ley, que generan conflicto, sería mejor sentarse y hablar", enarbolando la bandera del diálogo sincero y leal que dice querer tener con las instituciones catalanas, explica Europa Press.
En este sentido ha dicho que quiere reunirse con el presidente de la ACM, Miquel Buch, para preguntarle por qué quiere "instar a los ayuntamientos a aprobar mociones para colgar o descolgar banderas", y también se abre a hablar con todo aquél que esté dispuesto a abordar la mejora del encaje de Catalunya desde la legalidad y sin imposiciones.
REUNIÓN CON PUIGDEMONT
También ha explicado que tiene una relación "fluida" con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, pero ha avisado de que no permitirá que se incumpla la ley y de que habrá una respuesta rápida y contundente si se vulneran las normas.
Millo ha lamentado que desde el independentismo se haya querido proyectar la imagen de que el Estado no quiere dialogar.
"Si alguien piensa que defender el diálogo equivale a ser flexible en la defensa del cumplimiento de la ley, se equivoca", ha sentenciado Millo, que también ha dicho que habló informalmente con Puigdemont este miércoles en la gala de presentación de la Guía Michelin España y Portugal 2017 en Vilablareix (Girona). Durante su conversación no fijaron una fecha para reunirse, pero ha apuntado que quiere encontrarse con él y abordar la situación desde la lealtad: "Estamos en contacto, hay una relación fluida, le llamo, le llama o nos escribimos un mensaje". "Ahora una parte dice 'referéndum o referéndum'. Veamos ahora que dice la otra parte y busquemos un punto medio", ha recetado Millo, que también ha lamentado que desde el independentismo se haya querido proyectar la imagen de que el Estado no quiere dialogar.