Espera modificar el mecanismo de salvaguarda para evitar una frontera dura en Irlanda
La primera ministra del Reino Unido, Theresa May, ha recalcado este sábado que está “decidida” a que el Brexit salga adelante y las islas abandonen la Unión Europea en la fecha prevista para la salida del país del bloque europeo el próximo 29 de marzo. De este modo, May no tiene previsto pedirle a Bruselas una extensión del plazo.
Sin embargo, la 'premier' mantiene la esperanza de acudir a Bruselas para renegociar el acuerdo del Brexit con los líderes comunitarios en los próximos días con la finalidad de modificar el polémico mecanismo de salvaguarda para evitar una frontera física en Irlanda del Norte, aunque la UE ha descartado por el momento modificar el pacto que Reino Unido y los Veintisiete sellaron en noviembre.
"Cuando regrese a Bruselas para batallar por Gran Bretaña e Irlanda del Norte lo haré armada con un nuevo mandato, nuevas ideas y una renovada determinación para acordar una solución pragmática”, ha afirmado la primera ministra en un artículo publicado en el diario The Sunday Telegraph.
El Parlamento británico aprobó la pasada semana una enmienda que insta al Gobierno a negociar “arreglos alternativos” a la cláusula de salvaguarda norirlandesa. Aún así, May sostiene en su artículo que reemplazar la salvaguarda por una solución distinta es “una opción”.
Asimismo, el presidente del grupo parlamentario conservador, Graham Brady, que propuso esa enmienda en la Cámara de los Comunes, “estaría conforme asimismo si la salvaguarda tuviera una limitación temporal o un mecanismo de salida unilateral”. El viceprimer ministro irlandés, Simon Coveney, insistió por su parte en que la UE no renegociará el tratado de salida y no aceptará ningún acuerdo que no incorpore una cláusula de seguridad para Irlanda del Norte.
“La salvaguarda es necesaria para todos nosotros. No se trata de comercio o de economía, sino de personas y de paz”, escribió Coveney en The Sunday Times. El mecanismo de salvaguarda asegura que no se levantará una frontera entre las dos Irlandas mientras Londres y Bruselas no hayan alcanzado un nuevo acuerdo de comercio bilateral, lo que todavía puede tardar años. De hecho, La ausencia de controles entre la República de Irlanda y la región británica de Irlanda del Norte es una de las condiciones que especifica el tratado que llevó la paz a la región en 1998.
Los conservadores más euroescépticos, sin embargo, critican que esos planes dejarán al Reino Unido integrado en las estructuras de la UE hasta que se firme un nuevo tratado comercial, lo que dificultará que el país firme nuevos pactos comerciales con terceros países. Ese rechazo llevó a una amplia mayoría del Parlamento británico a rechazar el pasado 15 de enero el acuerdo del Brexit.
ISABEL II PODRÍA SER EVACUADA DE LONDRES
Asimismo, ante la posibilidad de que el Reino Unido rompa con la UE de forma no negociada el próximo 29 de marzo, The Sunday Times reveló este domingo que el Gobierno ha recuperado un antiguo plan diseñado durante la Guerra Fría para “evacuar” a la reina Isabel II de Londres si se producen grandes disturbios. “Los planes, diseñados originalmente para ser llevados a cabo en caso de un ataque nuclear de la Unión Soviética, contemplan sacar a la reina y el Duque de Edimburgo de Londres y llevarlos a una localización secreta”, indica el diario.
La residencia oficial de la soberana británica está fijada en el palacio de Buckingham, en el centro de Londres, si bien ella y su esposo pasan los fines de semana en el castillo de Windsor, a unos 30 kilómetros al oeste de la capital, y largas temporadas en el castillo de Balmoral, en Escocia.