El líder del PP ha conversado en la recepción de los Reyes con algunos 'barones' socialistas
La cautela por bandera. Así se ha mostrado Rajoy sobre su posible investidura con la abstención de la bancada socialista. "Lo mejor que puedo hacer es estar callado", ha apuntado en un corrillo con periodistas durante la recepción que los Reyes han ofrecido en el Palacio Real con motivo de la Fiesta Nacional. "No debo hablar", ha sentenciado el líder del PP.
Rajoy, quien ha podido saludar personalmente al presidente de la Comisión gestora socialista, Javier Fernández, ha admitido que la interlocución con el PSOE es ahora "más fácil" que cuando Pedro Sánchez era secretario general. Además, poco antes de empezar la recepción, ha habido momentos para que el presidente pudiera conversar con los presidentes autonómicos socialistas, puesto que todas las autoridades han coincidido en la misma sala durante una media hora.
Allí estaban la andaluza Susana Díaz, el castellanomanchego Emiliano García-Page, el extremeño Guillermo Fernández Vara, el aragonés Javier Lambán y la balear Francina Armengol.
Rajoy no acudirá a la Cumbre Iberoamericana que se celebrará a finales de mes en Cartagena de Indias (Colombia)
Rajoy, que en su conversación se ha mostrado moderadamente optimista, ha dado por hecho que habrá debate de investidura, aunque ha comentado a la prensa que todavía no ha empezado a esbozar su discurso y que aún deberá esperar, puesto que mañana recibe a la primera ministra británica, Theresa May, y esta tarde tiene que preparar esa entrevista y analizar la crisis del 'Brexit'.
Aunque no ha querido aventurar las fechas exactas en que se celebrará el debate, previsiblemente la última semana de octubre, sí ha confirmado que no podrá asistir a la XXV Cumbre Iberoamericana de Cartagena de Indias (Colombia) el 28 y 29 de octubre. "Está muy bien que vaya el Rey", ha señalado al respecto, puesto que el jefe del Estado sí estará presente en este encuentro iberoamericano después de que los colombianos rechazaran el acuerdo de paz entre el Gobierno de Santos y las FARC.