Carles Puigdemont deberá conformarse con un cargo simbólico desde Bruselas
La reunión de los representantes de JxCat, ERC, CUP y el PDeCAT este lunes por la tarde en el Parlament de Catalunya podría haber dado con una solución para desbloquear la investidura. Con la vía Puigdemont avocada al fracaso, el expresidente de Asamblea Nacional Catalana, Jordi Sánchez, actualmente en la prisión de Soto del Real, sería el candidato elegido por los independentistas para encabezar la Generalitat.
Hasta ahora el grueso de la negociación había recaído en las espaldas de JxCat y ERC, los dos principales partidos soberanistas en el Parlament, pero este lunes se han sumado representantes de la CUP y del PDeCAT. La suma de estos dos últimos actores evidencia que las conversaciones han avanzado y que las cuatro partes están en disposición de dar su visto bueno, si bien aún falta sellar el acuerdo definitivo.
Por parte del PDeCat ha destacado la presencia del número dos de la formación, David Bonvehí; el partido forma parte de la candidatura de JxCat, que también incluye independientes, pero pese a ello no siempre han defendido las mismas posiciones. Y por su parte JxCat, en la reunión de este lunes han acudido Elsa Artadi, Josep Rull, Eduard Pujol y Pep Riera; por parte de ERC se ha visto a Sergi Sabrià y de la CUP a sus diputados Carles Riera, Maria Sirvent, Vidal Aragonés y Natàlia Sánchez.
Aunque no es oficial, varios medios mencionan a fuentes cercanas a la negociación y explican que el acuerdo pasaría por Jordi Sánchez. El miembro de JxCat y ex presidente de la Asamblea Nacional Catalana sería el elegido por los independentistas para liderar la candidatura a la Generalitat que se presente a la sesión de investidura en el Parlament. El problema está en que sigue preso en la cárcel de Soto del Real y para acudir a la sesión parlamentaria debería recibir un permiso del juez, que no parece fácil en este momento.