También se ha quitado la portavocía a la aragonesa Susana Sumelzo
La Gestora del PSOE ha decidido los cambios en el grupo parlamentario tras la ruptura de la disciplina de voto por parte de 15 diputados que votaron 'no' en la investidura de Mariano Rajoy. A través de una rueda de prensa, el portavoz de la misma, Mario Jimenez, ha indicado que en las modificaciones ha pesado la "confianza" en los parlamentarios elegidos para sustituir a los destituidos.
Los principales perjudicados en esta 'purga de díscolos" son la catalana Meritxell Batet y la balear Sofía Hernanz, y ha quitado la portavocía a la aragonesa Susana Sumelzo, mientras que ha dejado sin cambios a los socialistas del 'no' a Rajoy que forman parte de las mesas de comisión, entre ellas la juez Margarita Robles, que seguirá presidiendo la de Justicia.
El portavoz de la Gestora ha justificado estos cambios tanto por la capacidad y la confianza
Así lo ha anunciado este jueves en rueda de prensa el portavoz de la Gestora, Mario Jiménez, quien ha detallado que la dirección del grupo parlamentario quedaría así: Antonio Hernando continuará como presidente y portavoz; el secretario general seguirá siendo Miguel Ángel Heredia; mientras que entre los portavoces adjuntos se mantiene a Isabel Rodríguez, Marisol Pérez y José Luis Ábalos, a los que se suma el abulense Pedro Muñoz, que releva a Sofía Hernanz.
La quinta portavocía adjunta de la dirección quedará vacante hasta que se resuelvan las negociaciones en las que se han embarcado el PSOE y el PSC para replantear sus relaciones.
Los cambios decididos por la Gestora afectan a los portavoces del Grupo Socialista, pero no a sus representantes en las mesas de las comisiones porque, según Jiménez, "la estructura institucional tiene que quedar al margen de los cambios del partido". De este modo, la magistrada en excedencia Margarita Robles continuará ocupando la presidencia de la Comisión de Justicia.
El portavoz de la Gestora, que no ha hablado de las posibles multas que pueda añadir la dirección del Grupo Socialista, ha justificado estos cambios tanto por la capacidad de los diputados que van a asumir la responsabilidad por "su conocimiento, experiencia y trayectoria", pero también por criterios de "confianza".