El presidente del Gobierno sale reforzado al conseguir el PSC su mejor resultado desde 2006
El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, apostó por la jugada de prescindir de su ministro de Sanidad, Salvador Illa, aun en plena pandemia y lanzarlo como candidato a la Presidencia de la Generalitat, giro que las urnas han confirmado un "éxito" al situar de nuevo al PSC como primera fuerza en Cataluña.
Tras conocerse los resultados, Sánchez reaccionaba escribiendo un mensaje en su cuenta de Twitter. "El socialismo ha ganado las elecciones. Una fantástica noticia para hacer posible el cambio y el reencuentro por el que tanto ha trabajado el PSC. Gracias, Salvador Illa, por devolvernos la ilusión de conseguir un futuro mejor para Cataluña y para España", ponía.
El socialismo ha ganado las #Elecciones14F. Una fantástica noticia para hacer posible el cambio y el reencuentro por el que tanto ha trabajado @socialistes_cat.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) February 14, 2021
Gracias, @salvadorilla, por devolvernos la ilusión de conseguir un futuro mejor para Cataluña y para España. #PSC /❤
El PSC conseguía casi el 23% de los votos y 33 escaños, el doble de lo conseguido por Miquel Iceta en los comicios de 2017 y elevando a los socialistas a primera fuerza, hito que no conseguían desde 2003.
Por un lado, lo que se denominó el 'efecto Illa' agitó el tablero político en Cataluña y por tanto a las demás candidaturas y, así, le hicieron la campaña al exministro al situarlo todos los partidos en el foco de la disputa electoral. Para que la estrategia saliera bien, el propio Sánchez se implicó de manera activa con visitas y gestos con Cataluña tanto antes como durante la campaña electoral, pero también, implicando al PSOE y a su equipo más próximo en la estrategia de Illa para que fuera un éxito. Así, su jefe de Gabinete en Presidencia del Gobierno, Ivan Redondo, y su adjunto en La Moncloa, Paco Salazar, han estado en la primera línea del PSC incluso presencialmente.
Con la jugada de Illa, el presidente también ha logrado, admiten fuentes de su entorno, un refuerzo de la marca PSOE en Cataluña de cara a unas elecciones generales y el alineamiento total del PSOE y del PSC. El hecho de que Illa era una apuesta personal de Sánchez lo reconoció en la misma noche electoral el propio candidato socialista cuando se dirigió a "su amigo" y le dijo: "Presidente, esta victoria es nuestra victoria".
El líder del PSOE refuerza su victoria al ver que, por contra, la alternativa nacional que representa el PP sale muy debilitada en estas elecciones, pues los de Pablo Casado sólo han conseguido escaños en una de las cuatro provincias catalanas (Barcelona) y encima han sido superados ampliamente por Vox. Si el PP había conseguido un 7,42% en las últimas generales, en las elecciones de este domingo no ha llegado al 4%, peor incluso que en las anteriores autonómicas. Y, en cambio, el partido que lidera Santiago Abascal supera incluso a la suma de PP y Ciudadanos, lo que abre una batalla por el liderazgo de la oposición que puede facilitar al Gobierno de coalición con los demás partidos.