Leopoldo López: no hubo golpe de Estado
Josep Borrell, ministro de Exteriores en funciones de España, afirmaba este viernes que el Gobierno "limitará" las actividades políticas de Leopoldo López, que se encuentra refugiado en la residencia del embajador español en Caracas.
"España no va a permitir que su embajada se convierta en un centro de activismo político", ha comentado a los periodistas en el Líbano, donde está en visita oficial. También ha mencionado que los encuentros como el que tuvo este jueves con la prensa, a partir de ahora "estarán regulados".
En este sentido, ha explicado que la figura de "huésped o acogido" implica una limitación en su actividad política, en función al derecho internacional.
Por su parte, el líder del partido Voluntad Popular, Leopoldo López, comparecía este jueves frente a la residencia del embajador español en Venezuela, al que agradecía que le haya acogido en calidad de "huésped" y ha reivindicado la rebelión de militares venezolanos el pasado 30 de abril no como un golpe de Estado sino como parte de un proceso para la instauración de un gobierno de transición para Venezuela.
"Lo ocurrido el día martes es parte de un proceso que siempre se planteó como un primer paso, no como un proceso definitivo", ha afirmado en respuesta a una pregunta de la prensa sobre la "precipitación" de los sucesos del 30 de abril.
En cualquier caso negó que se tratara de un intento de golpe de Estado y ha amparado esta maniobra en el Artículo 333 de la Constitución. "Cualquier venezolano, tenga uniforme o no, tiene el deber de contribuir a restituir el orden constitucional". "El quiebre que se abrió el 30 de abril se convertirá en una grieta y la grieta en una fisura", ha asegurado.
López ha subrayado que las Fuerzas Armadas "son un componente fundamental de nuestra lucha". El dirigente opositor ha explicado que durante su periodo en arresto domiciliario se reunió con "comandantes, con generales y con oficiales de los distintos organismos policiales" que manifestaron su adhesión a la Constitución y al autoproclamado presidente Juan Guaidó.
Tras la rebelión de integrantes del Ejército del pasado martes, López entró en la Embajada de Chile, aunque finalmente se trasladó a la residencia del embajador español, Jesús Silva. "Agradecerle al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a los españoles, al pueblo español, que ha sido muy solidario con Venezuela", ha apuntado.
En ese sentido, ha subrayado que se encuentra en dependencias diplomáticas españolas en calidad de "huésped, y en esa condición me voy a mantener". Ante la pregunta de por qué está en dependencias españolas, López ha señalado que teme una nueva detención. "¿Por qué estoy aquí y no estoy en mi casa? Me buscarían nuevamente llevarme a (la cárcel militar de) Ramo Verde", ha argumentado.
"Nadie quiere volver a la cárcel. La cárcel fue un infierno, pero no le tengo miedo a la cárcel igual que no le tengo miedo a ninguna de las herramientas de represión de Nicolás Maduro", ha argumentado, al tiempo que ha recordado que pasó "tres años de aislamiento y de torturas".
Sobre el futuro de las movilizaciones, López ha fijado el plazo de la fase del "cese de la usurpación" en "semanas". Después el objetivo es instaurar un gobierno de transición que sea el que convoque y organice unas elecciones democráticas. "Sí se puede", ha remachado.
Más tarde el líder opositor ha subrayado a través de su cuenta en la red social Twitter que "siempre he estado y sigo en Venezuela" y ha llamado al apoyo de la 'Operación Libertad', iniciada este martes.
"Todos debemos apoyar la Operación Libertad. Un proceso que ya arrancó y no se va a detener hasta que cese la usurpación y logremos la libertad de nuestro país!", ha señalado.
'OPERACIÓN LIBERTAD'
Guaidó anunció el martes el inicio de la 'Operación Libertad' asegurando que cuenta con el apoyo de "un grupo importante" de militares, incluidos el jefe del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), para derrocar a Maduro.
Consiguió movilizar a miles de personas por Caracas y otras ciudades y que más uniformados se sumaran a su causa, pero no logró que el ministro de Defensa y la FANB cambiaran de bando. Según la versión de Estados Unidos, Padrino y otros 'hombres fuertes' estaban convencidos pero Rusia y Cuba alertaron a Maduro.
Los cargas de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) contra manifestantes han dejado al menos cuatro muertos, 130 heridos y más de 200 detenidos tanto en la capital como en otros lugares, de acuerdo con varias ONG locales.
CRÍTICAS DEL EMBAJADOR DE VENEZUELA EN ESPAÑA
Por su parte, el embajador de Venezuela en España, Mario Isea, ha tildado de "insólito" que López esté usando la Embajada de España en Caracas como "base de operaciones" para "alentar un golpe". "No es apropiado, si es un huésped del gobierno español, que las condiciones las ponga él".
Isea ha incidido en que López "lleva cinco años" hablando de un posible alzamiento militar y ha criticado a la formación política de López, Voluntad Popular, porque según su juicio "ha sido la que ha impedido el diálogo". "Es él el que mantiene esa tesis de incendiar el país hasta que caiga el Gobierno".