Confirma que los cuatro casos de la variante británica detectados en Madrid llegaron de Reino Unido con PCR negativa
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha celebrado este domingo "el principio del fin" de la pandemia de Covid-19 que supone el comienzo de la vacunación masiva, pero insistió en la necesidad de "no bajar la guardia" porque aún quedan meses hasta conseguir la inmunidad colectiva necesaria para dar por vencido al virus.
Illa compareció a mediodía en rueda de prensa en la sede de la Delegación del Gobierno en Cataluña, justo a la hora en la que la mayoría de comunidades autónomas tenía previsto haber comenzado la vacunación. Tan solo quedaban por hacerlo en ese momento Canarias y Baleares.
El proceso había comenzado a las nueve de la mañana en una residencia de Guadalajara, donde fueron vacunadas Araceli y Mónica, las dos primeras personas en recibir la vacuna de Pfizer en España, de las primeras dosis llegadas el día anterior. A partir de mañana, explicó el ministro, comenzarán a llegar doce entregas semanales, de unas 350.000 dosis cada una. En total, serán 4.591.275 dosis, que permitirán inmunizar a 2.295.638 personas en todo el territorio nacional.
Subrayó que el proceso es "muy complejo" e implica un reto logístico y sanitario "sin precedentes" que durará varios meses. En ese sentido, quiso dar las gracias a la ciencia, por haber descubierto las vacunas; a la industria, por desplegar toda la capacidad posible para la fabricación y distribución masiva de las dosis; a las agencias e instituciones que han participado en el proceso de validación; y a todo el personal que está haciendo posible que las vacunas lleguen a los receptores.
Es "el principi odel fin", aseguró, "el principio es la vacuna, y el fin es inmunizar a todos los españoles" para poder así dar por derrotado al virus. Ese es el "objetivo prioritario" del Gobierno, aseguró, "derrotar al virus para reactivar la economía".
Sin embargo, alertó, "no nos confundamos", porque aún quedan por delante "meses que no van a ser sencillos". De hecho, recordó, las personas vacunadas hoy no recibirán la segunda dosis hasta dentro de tres semanas, y solo una semana después estarán realmente inmunizadas, por lo que incluso ellas siguen necesitando todas las medidas de prevención.
Quedan "días complejos en los que no podemos bajar la guardia", dijo el ministro, sobre todo de cara a las fiestas navideñas, en las que se intensifica el contacto social y la movilidad. En ese sentido, reiteró una "petición clara y explícita" para mantener la prudencia y "la guardia alta". "Es un día de esperanza, pero no podemos relajar las medidas", insistió, porque aún quedan "meses" para dar por superada la pandemia.
El próximo 6 de enero, "qué bonito regalo" de Reyes Magos, comentó, está prevista la reunión de la Agencia Europea del Medicamento para evaluar la vacuna de Moderna. "Lo más probable" es que sea autorizada, y a partir de ahí la Comisión Europea procedería a la adquisición y distribución de las dosis, también a España, que espera recibir 80 millones de dosis. La previsión, precisó, es que en junio haya entre 15 y 20 millones de personas vacunadas en España.
"VACUNAR SALVA VIDAS"
Illa pidió a los ciudadanos que sigan las instrucciones del personal sanitario. Las citaciones para la vacuna se recibirán en función del colectivo al que se pertenezca. Pidió acudir al centro de salud cuando se reciba esa cita porque "vacunarse salva vidas", no solo la propia sino también las del conjunto de la sociedad al lograr esa inmunidad de grupo.
Insistió, al hilo de ese mensaje de ánimo ante la vacunación, que el proceso ha sido extraordinariamente rápido, menos de un año desde que se secuenció el genoma del virus, pero "sin sacrificar seguridad ni eficacia" gracias a un esfuerzo y a una movilización de recursos "sin precedentes" en la historia de la humanidad, un esfuerzo que "aún hoy no somos capaces de valorar lo que significa".
De hecho, subrayó que casi un millón de personas han participado en ensayos clínicos en todo el mundo para asegurar que hoy las primeras personas vacunadas en España tienen las máximas garantías de seguridad y eficacia.
El ministro subrayó su preocupación por el "cambio de tendencia" constatado la semana pasada en la evolución de los contagios, claramente al alza, y reiteró el llamamiento para que las alegrías navideñas "no sean lloros de mañana", para seguir "al pie de la letra" las indicaciones de las autoridades sanitarias, y para "no bajar la guardia".
Confirmó, además, que los cuatro casos de la variante británica del virus detectados en la Comunidad de Madrid son "leves" y todos ellos son personas desplazadas desde Reino Unido antes de que se diera a conocer esa variante, y tenían la prueba PCR exigida para entrar en España. Explicó que él mismo habló el sábado con el consejero de Sanidad, Enrique Ruíz Escudero, además de las conversaciones que han mantenido técnicos del Ministerio y de la Consejería.