El partido decide su postura a pocas horas de reunirse con el Rey en la ronda de consultas
El foco vuelve a alumbrar a Ferraz. Tras protagonizar una semana política que terminó con la cabeza de su exsecretario general, Pedro Sánchez, el Comité Federal se reúne de nuevo para adoptar una posición en la ronda de consultas que inicia el Rey el próximo lunes y su postura ante la inminente sesión de investidura de Mariano Rajoy.
La principal cuestión que abordarán desde el partido no es si el partido rechaza la candidatura del partido popular o si se abstienen. El debate más trascendente será como ejecutan esta última opción en el Congreso debido, principalmente, a que los partidarios del “no es no” ya dan por perdida la batalla.
Javier Férnadez, presidente de la gestora que se encuentra al frente del partido, ha señalado que la abstención de los diputados del PSOE es “un mal menor”
No obstante, algunos miembros del partido siguen defendiendo esta opción, como es el caso del PSC y Miquel Iceta que han cogido fuerzas tras su proceso de primarias. Una posible rebelión que los socialistas de Andalucía, liderados por Susana Díaz, consideran que puede tener consecuencias de producirse.
Javier Férnadez, presidente de la gestora que se encuentra al frente del partido, ha señalado que la abstención de los diputados del PSOE es “un mal menor”. Por lo tanto, las palabras del asturiano permiten leer entre líneas que el partido busca lavar la imagen tras una dura “guerra interna”. Una tarea más que complicada si se tiene en cuenta que ambos frentes se vuelven a verse las caras con apenas dos semanas de producirse el desencuentro.
La abstención bloque o técnica será la respuesta que se deberá transmitir al finalizar su reunión. Esta última alternativa permitiría que miembros del partido que no quieren respetar la disciplina de voto puede mantenerse en el 'no'. Para ello, con la abstención de 11 diputados socialistas se permitiría la investidura de Mariano Rajoy. En Ferraz vuelven a estar todas las miradas tras el nuevo sonido de los tambores de guerra que preceden a la "fumata roja" de la abstención.