Los votos favorables de Ahora Madrid, PP y Ciudadanos y la abstención del PSOE han sacado adelante el plan
Los votos favorables de Ahora Madrid, PP y Ciudadanos y la abstención del PSOE han sacado adelante en el Pleno de Cibeles el plan especial del estadio Santiago Bernabéu y su entorno, con dudas sobre la seguridad jurídica planteadas por los socialistas.
El nuevo estadio Santiago Bernabéu supondrá para los madrileños sumar un nuevo espacio ajardinado de uso público de 6.000 metros en la plaza de los Sagrados Corazones, algo que será posible con la demolición del centro comercial de la Esquina del Bernabéu. El plan especial saneará las deficiencias del estadio, mejorará el espacio urbano colindante y la calidad arquitectónica del Bernabéu.
Además el espacio entre el paseo de la Castellana y la fachada oeste del estadio, actualmente destinado a un aparcamiento, se transformará en una plaza pública de uso peatonal como antesala al Bernabéu. En esa fachada, donde no hay viviendas, se permitirá un vuelo singular de la cornisa para formar un atrio de entrada de 2.000 metros. Dicho vuelo no se apoyará en el suelo, por lo que no afecta a los límites.
El plan especial saneará las deficiencias del estadio, mejorará el espacio urbano colindante y la calidad arquitectónica del Bernabéu
El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, ha explicado que es el Ayuntamiento el que firma el plan especial asumiéndolo como iniciativa pública porque es una "actuación de ciudad" y con beneficios que revierten en ella, como los 13 millones en inversiones que asume el Real Madrid para remodelar el entorno del estadio.
En el trámite de alegaciones se presentaron siete, tres de ellas desestimadas y cuatro de ellas parcialmente estimadas, firmadas por la Asociación Valores del Madridismo, particulares que residen en el entorno, PSOE y Ecologistas en Acción. Como obligación se incluye la redacción de un plan de movilidad sostenible antes de la presentación de la solicitud de licencia.
El portavoz del área de Ciudadanos, Bosco Labrado, ha expuesto que no le parecía correcta la elección de un plan especial como herramienta urbanística mientras que la socialista Mercedes González ha recordado que la remodelación del estadio no es ya una realidad porque la Justicia tumbó acciones anteriores. La modificación puntual fue anulada por la justicia por vulnerar la Ley del Suelo y el Plan General. Posteriormente la Comisión Europea sancionó al Real Madrid por percibir ayudas en la transmisión de parcelas.
CUBIERTA RETRÁCTIL
Meses atrás, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, presentó con la alcaldesa, Manuela Carmena, la reforma del estadio y su entorno. En esa rueda de prensa avanzó que se conservará el nombre aunque no se descarta un 'apellido comercial', dispondría de una cubierta retráctil a partir de una piel diseñada a base de bandas de acero y líneas vanguardistas y que tampoco se descarta un hotel. Entonces afirmó que las obras empezarían en 2017 y tendrían un coste para las arcas blancas de 400 millones de euros.
El nuevo proyecto no supone aumento de la edificabilidad, límite que establecía la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), y sí una mejora de la accesibilidad. Los trabajos se sacarán por el Real Madrid a licitación pública, proceso en el que no podrá concurrir la constructora que preside Florentino Pérez.
Sobre la posible incorporación al proyecto de un hotel y un centro comercial, el presidente del club declaró que "nadie dice que no pueda haber actividad comercial y hotelera" siempre que se mantenga el acuerdo de no aumentar la edificabilidad, que es la "pega que puso la Justicia".