La exdiputada del PP avisa de que el partido perderá la condición de centroderecha 'si sigue aferrado a Rajoy'
Cayetana Álvarez de Toledo ha confirmado este lunes lo que parece que ocurre en el seno del PP pero nadie quiere reconocer: son muchos los que piden la cabeza de Mariano Rajoy para dar un giro total al partido. Aunque destacados dirigentes, como el ministro de Sanidad en funciones, Alfonso Alonso, digan que ese debate no está sobre la mesa, la que fuera diputada 'popular' en la pasada legislatura afirma todo lo contrario: "El PP hierve en cábalas y comentarios sobre cuándo y quién debe suceder a Rajoy".
Rajoy "difícilmente podrá evitar que se le recuerde como el hombre que sumió al centroderecha español en la más profunda crisis política"
Así lo indica en un artículo que ha escrito en El Mundo, titulado 'Presenta desorientación', en el que alerta de que el PP acabará por perder del todo su condición de referente de centroderecha "si sigue aferrado a Rajoy". Sobre todo, porque aunque "es probable que Mariano Rajoy Brey sea recordado como el presidente que sacó a España de la más profunda crisis económica de su historia reciente", remarca que "difícilmente podrá evitar que también se le recuerde como el hombre que sumió al centroderecha español en la más profunda crisis política desde su refundación en 1990".
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Y es que, dice la exdiputada del PP, el partido "ha pasado en cuatro años de la cima de la mayoría absoluta al abismo de una posible descomposición" si no se produce "una catarsis total". El problema viene de "la absoluta ausencia de debate interno", señala la actual directora del área internacional de la fundación FAES, que dice que tras los comicios del 20 de diciembre "no ha habido ni un atisbo de reflexión crítica" sobre las causas del retroceso electoral.
Ese es el problema, resalta. Ese y que se está haciendo oídos sordos a las voces que piden un cambio en la cúpula. En este sentido, ante las palabras de Alfonso Alonso de que "nadie" se planteaba la marcha de Rajoy, Álvarez de Toledo se muestra muy crítica: "¿Nadie?¿De verdad nadie? Que se lo pregunten a cualquier becario del más tierno brote digital. En el centro y en la periferia, en los escaños y en la calle, en las sedes de distrito y hasta en la séptima de Génova, el PP hierve en cábalas y comentarios sobre cuándo y quién debe suceder a Rajoy".
CRÍTICAS POR NO IR A LA INVESTIDURA
Pero Álvarez de Toledo no se queda ahí, y también arremete contra Rajoy por no haberse presentado a la investidura. "Rajoy no puede ser el candidato en una hipotética segunda vuelta electoral porque ganar es gobernar y Rajoy no ha podido hacerlo. Sería incomprensible que un hombre incapaz de presentarse a su investidura quisiera comparecer de nuevo ante los votantes", ha aseverado. Su renuncia a la investidura "está abocando al PP a un proceso de renovación caótico que muy bien pudiera volverse en contra del interés de sus votantes", ha resaltado.
Rajoy no debe presentarse otra vez a las elecciones: "Ni siquiera ha sido capaz de presentarse a su investidura"
Además, indica, "entre los motivos principales de su derrota está la ausencia de un proyecto". Bajo su punto de vista, "es dudoso que España necesite a Rajoy o a cualquier otra cara, nueva o gastada", y critica el "fulanismo" que afecta al centroderecha porque "todas las discusiones sobre la sucesión se centran en las personas" y "el problema del PP es el proyecto que no tiene".
En este sentido dice que "no es que el Gobierno no haya sabido comunicar; es que no sabía qué comunicar", y remarca que "al plasma no se llegó por convicción sino por defección. Por la ausencia de una visión de país capaz de ser explicada y compartida".
¿QUÉ LE HA OCURRIDO AL PP?
En opinión de Álvarez de Toledo, el problema ha sido que "el Gobierno renunció a la articulación de un proyecto alternativo al de la izquierda" y no se mostró "activo y firme frente a la rancia deslealtad secesionista" ni "implacablemente eficaz contra la corrupción propia y ajena", entre otras cosas.
"Su reconstrucción será la gran tarea política de los próximos años", dice la exdiputada del PP, que reclama que el próximo congreso del partido del que salga el nuevo líder sea "democrático en los procedimientos: con varios candidatos al liderazgo; sin presiones ni avales amañados; libre, abierto y transparente; un militante, un voto". Porque si el partido no cambia, dice, estará abocado a desaparecer. "Si el PP opta por la continuidad en las personas y en las prácticas, si no emerge como un partido nuevo -incluso con nuevas siglas y desde luego con una sede distinta- puede prepararse: su destino será la fusión por absorción de Ciudadanos, en la triste estela de UPyD".
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