Cataluña se adelantó y publicó el domingo sus normas para los paseos de menores

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Los menores de 14 años solo podrán ir con adultos a la compra, la farmacia o el banco

Si en las primeras etapas de la pandemia el Ejecutivo catalán defendía llevar a cabo sus propios planes para el confinamiento y exigía que este fuera total -al igual que otras CCAA y como el Consejo de Ministros acabó decretando-, ahora también quiere controlar la paulatina vuelta a la normalidad. Insisten los socios de Govern en Cataluña en que el desconfinamiento debe ser descentralizado, ya que arguyen que la región tiene las competencias para decidir sobre este asunto.

Desde los sectores independentistas se ha defendido, desde el inicio de la crisis, que la gestión de la pandemia por territorios es más eficaz y se ha citado reiteradamente el caso alemán, donde los estados federados pueden, por ejemplo, decidir la reapertura de los comercios. En cambio, en España, con todas las competencias relevadas por el estado de alarma, la Conselleria de salud no tiene margen de maniobra y Cataluña, al igual de que resto de regiones debe plegarse a los dictámenes de Sanidad. Esta recentralización ha sido el origen de muchas críticas desde JxCat y ERC, que han puesto la directa en algunas cuestiones como el cierre total de las poblaciones de la Conca d’Òdena (Barcelona), la compra de material, o el recuento de los fallecidos.

Los permisos para menores acompañados está siendo el último foco de tensión. La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, confirmaba el martes las informaciones que apuntaban a que el plan del Gobierno era permitir a los menores de 14 años salir a la calle acompañados de un adulto, pero solo para ir a la compra, a la farmacia o al banco. Una postura que chocaba de lleno con la de la Generalitat, partidaria de ofrecer paseos y mucha más flexibilidad.

Tras un tsunami de críticas a esta medida en redes sociales y caceroladas en ciudades como Barcelona, Illa anunciaba, passadas las 21.00 horas del martes, que tiene previsto aprobar el próximo domingo que los niños menores de 14 años puedan salir a dar paseos y no solo a acompañar a sus padres en las tareas permitidas con el estado de alarma, como por ejemplo ir a hacer la compra, como se ha informado en la rueda de prensa del Consejo de Ministro. Illa ha precisado que "dar paseos" es "dar paseos" y que en los próximos días se regularán las condiciones de los mismos, como la distancia o el tiempo máximo.

Aún con la revisión que anticipa el titular de Sanidad, el conjunto de directrices difundidas por la Generalitat el pasado fin de semana no acaba de ajustarse al esquema de la coalición PSOE-Podemos, pero desde Cataluña se espera poder moldearlo a semejanza de sus recomendaciones. "La Conselleria de Salut tiene un plan creado hace días", ha remarcado el portavoz republicano en el Congreso, Gabriel Rufián, quien se ha congratulado por "la rectificación y la voluntad de consensuar el plan con las CCAA".

La receta catalana amplía la edad hasta los 18 años y se basaba en salidas de los menores según franjas horarias, acompañados de un adulto, para pasear -en ningún caso para jugar-, con estrictas normas de distanciamiento social y con obligatoriedad de llevar mascarilla. Se aboga por usar los parques y jardines públicos y se desaconseja claramente entrar en los comercios.

REACCIONES EN CATALUÑA

La rebaja inicial de estas medidas por parte del Ejecutivo de Pedro Sánchez había airado a los independentistas, que el domingo presentaron al presidente del Gobierno un plan para un retorno paulatino de todas las actividades. El president catalán, Quim Torra, explicó que instó al líder socialista a que impulse una gestión no homogénea territorialmente y afirmó no estar sólo en estas reclamaciones, que también le hacen otros presidentes autonómicos.

La postura de junteros y republicanos es que los municipios son una pieza clave en el levantamiento de las restricciones "Cada municipio, cada comarca, no lo sufre de la misma manera. Debe estar muy bien pensado", señaló la consellera de Presidencia y portavoz de la Generalitat, Meritxell Budó, tras lo que reclamó que se devuelvan las competencias a la Generalitat.

La izquierda soberanista ha ido un paso más allá. El presidente de ERC en el Parlament, Sergi Sabrià, ha pedido a la ciudadanía que haga caso a lo que diga la Generalitat sobre la manera en que los niños deben salir a la calle: "Yo les digo que hagan caso de lo que diga la Generalitat, y que no sufran que no se encontraran a ningún guardia civil poniendo multas a sus hijos, que no sufran".

El líder de los republicanos en el Parlament ha sostenido que la consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, puede decidir sobre las salidas de los menores y puede implementar medidas: "Y sino, que venga la unidad militar esta y que detenga a los padres. ¿Verdad que no lo hará? Pues hagámoslo desde Cataluña y hagámoslo bien".

Torra por su parte, no ha aceptado el matiz del Gobierno sobre el desconfinamiento progresivo de los niños, y ha exigido al Ejecutivo guiarse por los expertos para tomar las decisiones. "La cuestión no es si se rectifica o no; la cuestión son los informes de los expertos. ¿Por qué se toma una decisión u otra? ¿Dónde están los informes que avalan las medidas que aprueba el Gobierno español? ¿Por qué nunca ha contestado a los que les hemos presentado desde la Generalitat?", ha planteado Torra.

La qüestió no és si rectifica o no; la qüestió són els informes dels experts. Per què es pren una decisió o una altra? On són els informes que avalen les mesures que aprova el Govern espanyol? Per què mai no ha contestat els que li hem presentat des de la Generalitat? https://t.co/N8RSDWERsI

— Quim Torra i Pla (@QuimTorraiPla) April 21, 2020