El PP ya ha adelantado que no va a participar en ningún "cordón sanitario"
La decisión de Ciudadanos de optar a la Mesa del Congreso presentando la candidatura del catalán José María Espejo-Saavedra puede facilitar al PSOE, Unidas Podemos y el PNV quitar a Vox al menos uno de los puestos a los que aspira, ya que así pueden sumar los votos que les sobren al diputado catalán para superar al partido de Santiago Abascal.
Tanto el PSOE como Unidas Podemos han anunciado su predisposición a trabajar conjuntamente para lograr que Vox quede fuera de la Mesa del Congreso que se elegirá el próximo 3 de diciembre al constituirse la Cámara. En la pasada legislatura, ambas formaciones ya buscaron aislar al partido que tachan de ultraderecha promoviendo su ubicación en el 'gallinero' del hemiciclo y su exclusión de los órganos de gobierno de la Cámara.
Pero ahora los de Santiago Abascal forman el tercer grupo de la Cámara con 52 diputados, y como los vicepresidentes del Congreso se votan de una tacada, al igual que los secretarios, y los cuatro más votados de cada tanda consiguen la plaza, para excluir a Vox se requiere aunar a buena parte de las formaciones nacionalistas e independentistas, o bien asegurar la complicidad del PP.
Socialistas y 'morados' no piensan renunciar a contar con la mayoría en la Mesa, lo que supone reservarse cinco de los nueve puestos, incluyendo la Presidencia, pero su intención es ofrecer las otras cuatro plazas al PP y a Ciudadanos, con los que vienen compartiendo el órgano rector desde enero de 2016.
EL PP SE LAVA LA MANOS
Antes de que comiencen las negociaciones, el PP ya ha adelantado que no va a participar en ningún "cordón sanitario" contra Vox y que se dedicará a buscar la mejor representación posible en la Mesa del Congreso. Sus 88 votos, más los de sus socios de Foro Asturias y UPN, les garantizan como poco dos puestos: una Vicepresidencia y una Secretaría.
En cambio Ciudadanos, con sólo diez diputados, necesitará concitar muchos apoyos para entrar en la Mesa del Congreso, pues su candidato precisa al menos superar los 52 votos que tiene Vox. La portavoz de la dirección naranja, Lorena Roldán, no ha detallado cómo pretenden entrar en el órgano de gobierno de la Cámara, escudándose en que la negociación aún no ha empezado. "Vamos a pelear para que Ciudadanos tenga voz, para que esté representado en la Mesa", ha declarado.
Pero el hecho de que exista una candidatura de Ciudadanos en las votaciones puede ser utilizado por PSOE y Unidas Podemos para arrebatar al menos un puesto a Vox, según asegurar a Europa Press fuentes parlamentarias.
Y es que socialistas y 'morados', más el PNV, que también apoya el 'cordón sanitario', suman 161 votos, con los que se aseguran dos de las cuatro plazas en liza y ahora podrán dedicar los sobrantes a apoyar a Ciudadanos para que alcance el listón de 53 votos que le permita superar a Vox. La cuarta plaza se reserva al PP.
Eso sí, la situación es más complicada en la votación de las Vicepresidencias ya que, si los partidos de la coalición de gobierno quieren reservarse la Vicepresidencia Primera de la Cámara, necesitarán reunir hasta 200 votos para excluir a Vox, ya que su primer candidato debe superar los 92 votos del PP y sus socios.