Cancillerías europeas y de EEUU valoran escenarios de futuro para Cataluña
La atención de varios países europeos se centra en la campaña y celebran reuniones con las candidaturas y con el Gobierno
- La diplomacia internacional en alerta ante el desenlace de las elecciones del 27S
El proceso soberanista en Cataluña y la incertidumbre política que se desprende del resultado electoral, en caso de victoria de las fuerzas independentistas, tiene alcance internacional. Las declaraciones públicas de líderes como el primer ministro británico, David Cameron, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente de EEUU, Barack Obama, han destapado la preocupación latente de varios países europeos y de EEUU.
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Además, el debate sobre en qué posición quedaría el hipotético estado Catalán frente a la Unión Europea (UE), el Banco Central Europeo (BCE) y el euro, genera inquietud más allá de nuestras fronteras y, según explica La Vanguardia, varias cancillerías de países europeos y de EEUU vigilan desde Barcelona la campaña del 27S.
Los delegados de países europeos están especialmente interesados en el debate entre Margallo y Junqueras
El medio explica que estos días han viajado hasta la capital catalana sus consejeros y mantienen contactos con el Govern y representantes de todas las candidaturas que se postulan para liderar la Generalitat. El rotativo señala que el trabajo de estos delegados es valorar diferentes escenarios del proceso político catalán y que están especialmente interesados en el debate entre el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, y el líder de ERC y número 5 de la lista Junts pel sí.
LA DIPLOMACIA ESPAÑOLA
Precisamente en el otro lado de la pugna por los apoyos internacionales está el Ministerio de Exteriores y toda la maquinaria de la diplomacia española que se esfuerza en centrar el debate sobre las consecuencias de la independencia sobre la relación de Cataluña con las instituciones mundiales.
Margallo está poniendo toda la carne en el asador para resaltar que se perderían derechos ciudadanos hoy reconocidos, pero también capacidad económica. La estrategia parece funcionar a la luz de las recientes declaraciones de la Comisión Europea. El organismo ha sido claro: pasaría a ser un tercer estado con respecto a España y la UE y debería volver a solicitar su ingreso.
Mariano Rajoy, que esperaba otro espaldarazo a sus lucha contra el soberanismo, ha reaccionado rápidamente: "La declaración coincide con las de Merkel, Cameron u Obama", ha señalado Rajoy, y ha añadido: "Yo creo que esto es así, basta simplemente con leer los tratados". Sin embargo, ha dicho estar convencido de que "no vamos a llegar a estos extremos".
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