El Ejecutivo comunitario defiende que su posición sobre el desafío independentista no ha variado desde 2004
La Comisión Europea se ha limitado de nuevo este jueves a expresar su "pleno respeto" por el "orden constitucional y marco jurídico de España", al ser preguntada por las detenciones y protestas producidas la víspera en Cataluña en relación con la organización del referéndum independentista del próximo 1 de octubre.
Bruselas insiste en que la independencia de un territorio del Estado miembro al que pertenece supondría salir también de la UE
"Confirmo lo que hemos dicho varias veces sobre este asunto. No tengo nada más que añadir salvo precisar que respetamos el orden constitucional de España, como es el caso de todas las Constituciones de nuestros Estamos miembro", ha declarado el portavoz jefe del Ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas.
Schinas ha mantenido la misma línea para responder en una rueda de prensa a más de una decena de preguntas sobre la situación en Cataluña, entre ellas si Bruselas ve con preocupación las detenciones de cargos políticos y las protestas en las calles, o si aceptaría un papel de mediador entre el Gobierno de Mariano Rajoy y el de Carles Puigdemont. "Siempre hemos evitado posicionar a la Comisión en el plano psicológico del optimismo, el temor o la preocupación. Nos posicionamos sobre hechos y los hechos son los que acabo de ofrecer", ha dicho el portavoz.
El Ejecutivo comunitario defiende que su posición sobre el desafío independentista no ha variado desde 2004, cuando el entonces presidente comunitario, Romano Prodi, advirtió de que la independencia de un territorio del Estado miembro al que pertenece supondría salir también de la Unión Europea.
Bruselas, además, subraya que así lo han expresado en los últimos días tanto el presidente de la institución, Jean-Claude Juncker, y su vicepresidente primero y responsable de Estado de derecho, Frans Timmermans. Ambos recalcaron la semana pasada que el orden constitucional español es el "punto de partida" para cualquier debate sobre la cuestión catalana.
"Esta posición no es nueva, ni es el resultado de una improvisación, son posiciones muy claras de la institución, expresadas a todos los niveles", ha expresado al respecto el portavoz de Juncker. A la pregunta de si la Comisión estaría dispuesta a asumir un papel de mediador o apelaría al diálogo entre las partes, Schinas ha vuelto a señalar el "mayor respeto" por la Constitución española y por el orden jurídico del país, "en cuyo seno deben, o pueden, abordarse todas estas cuestiones".
"GRAN PREOCUPACIÓN" EN LA UE
De manera general, la Unión Europea se mantiene en un segundo plano ante el desafío independentista en Cataluña y los Estados miembros optan por no hacer comentarios sobre la evolución de la crisis, porque asumen que es una cuestión "interna" del Gobierno español, aunque observen la situación con "gran preocupación", según fuentes europeas. "Lo tomamos como un asunto doméstico del Gobierno español. Claro que lo vemos con preocupación, pero confiamos en la democracia", afirmaba un alto cargo en Bruselas al ser preguntado por ello.
"Seguimos todo el proceso con gran, gran preocupación, pero no se puede especular sobre posibles reacciones", añadía, sobre la posibilidad de que el referéndum del 1 de octubre se abordara en próximas citas europeas, como reuniones de ministros o la cumbre en Tallin del 29 de septiembre.
Los embajadores de los 28 se reúnen cada semana en Bruselas para avanzar en los proyectos comunes, pero la situación en Cataluña no se ha llegado a sacar en esos encuentros formales y "no es probable" que se incluya en la agenda de próximas reuniones a nivel técnico, ni político, en opinión de las fuentes consultadas.