Bolsonaro ha designado a Guedes como su futuro ministro de Economía en un gesto hacia los mercados
El principal asesor económico del candidato brasileño de extrema derecha Jair Bolsonaro se ha mostrado a favor de vender algunos activos de generación energética de la estatal Eletrobras, lo que muestra otra contradicción en el equipo del canditado con mayor intención de voto de cara la segunda vuelta de las elecciones que se celebrarán a final de mes.
Las acciones de la compañía Electrobas se dispararon tras el triunfo de Bolsonaro en la primera vuelta electoral del domingo, pero luego cayeron un 13 por ciento el miércoles cuando el candidato dijo que privatizaría las unidades de transmisión y distribución pero no las de generación de electricidad.
Bolsonaro había prometido previamente privatizar algunas compañías controladas por el estado.Pero en comentarios a periodistas a última hora del viernes, su gurú económico, Paulo Guedes, expresó una opinión contraria, diciendo que estaba a favor de vender los activos de generación de Eletrobras en lugar de los de transmisión.
"La transmisión es muy difícil, pero en el caso de la generación hay casos en los que vendería y otros en los que no", declaró Guedes ante periodistas en Río de Janeiro. "Hay muchos casos de fuerte generación privada", añadió.
Bolsonaro nombró a Guedes como su futuro ministro de Economía y Finanzas, una clara señal de que planea ser un presidente favorable al mercado si vence al candidato del Partido de los Trabajadores, Fernando Haddad, el próximo 28 de octubre.
Pero en varias ocasiones Bolsonaro ha desacreditado públicamente a Guedes, revelando amplias diferencias en su equipo de asesores, compuesto por nacionalistas y defensores del libre mercado, que van desde la política fiscal, los salarios y hasta la posible privatización de la petrolera estatal Petrobras , la mayor empresa de Brasil.
Al comentar sobre su reticencia a vender unidades clave de Eletrobras, Bolsonaro mencionó temores a la dominación china, que compró activos eléctricos en Brasil en los últimos dos años. "China no está comprando en Brasil, China está comprando Brasil", dijo Bolsonaro. "¿Están dispuestos a dejar Brasil en manos de los chinos?", agregó.
La privatización de Eletrobras es un paso vital para ayudar a reducir el amplio déficit presupuestario de Brasil. El Gobierno saliente del presidente Michel Temer esperaba recaudar con su venta alrededor de unos 3.000 millones de euros, pero no logró la aprobación del Congreso.