Niega que Quim Torra sea un títere y sabe "perfectamente" que es buena persona
El expresidente de la Generalitat Artur Mas ha asegurado ante quienes amenazan con una segunda y eventual aplicación del artículo 155 de la Constitución -que sigue vigente en Cataluña y que este martes Mariano Rajoy y Pedro Sánchez han pactado volver a aplicar si el presidente de la Generalitat, Quim Torra, toma decisiones unilaterales-: "Que no se piensen que lo pueden arrasar y liquidar todo".
Dice que ahora el Gobierno de Rajoy tiene dos opciones: "puede sentarse a negociar o intentar arrasarlo todo"
"Que vayan con cuidado porque se les ha demostrado que el terreno de pruebas en Cataluña no es fácil tampoco para ellos, que no se piensen que lo pueden arrasar y liquidar todo", ha dicho Mas en una entrevista a 8tv. Además, ha destacado que una parte de la población ha demostrado que no tiene miedo y que está dispuesta a defender Cataluña, y ha avisado de que el Gobierno "puede sentarse a negociar o intentar arrasarlo todo".
Para Mas, "la capacidad de resistir de Cataluña es mayor de lo que creen", y ha considerado que liquidar el autogobierno no es nada fácil y es además una misión suicida para el Estado.
Sobre el nuevo presidente de la Generalitat y las acusaciones de xenófobo que ha recibido, ha defendido que es un buen chico y no es supremacista, sino que sabe "perfectamente" que es buena persona. Asimismo, ha destacado que Torra ejercerá como presidente de la Generalitat, ante el desconocimiento total de quienes sospechan que sea un títere de Carles Puigdemont, y ha reivindicado que de todos los presidentes de la Generalitat desde Josep Tarradellas "no ha habido ni uno sólo que fuera un títere".
VIAJES A MADRID
El expresidente de la Generalitat ha dicho que visita regularmente y de manera discreta Madrid para explicar el soberanismo, y considera que para que haya un diálogo debe haber una condición: "Que no haya condiciones para el diálogo". A su juicio, el juego democrático requiere estar atento a la realidad cambiante de las sociedades, no anclarse en un marco legal y no moverse porque no hay voluntad. "Si en Cataluña hay un cambio de primera magnitud, esto se tiene que escuchar. Lo que no puede hacerse es decir que de ello no se habla", ha apuntado.
En su opinión, es necesario adaptar los marcos legales a las realidades cambiantes de las sociedades, ya que sino no se habría evolucionado nada en los últimos siglos. Por último, ha agregado que tanto él como Carles Puigdemont avisaron a la población de que nada sería fácil y se entraba en un terreno desconocido, y aunque no ha habido daños premeditados, quizás "algún error de cálculo".