Angela Merkel y su ministro del Interior alcanzan un acuerdo en la cuestión migratoria
El acuerdo despeja la crisis política en el país alemán
- El ministro del Interior, Horst Seehofer, había amenazado con dimitir
El ministro del Interior y líder de la Unión Social Cristiana (CSU), Horst Seehofer, ha anunciado en la noche de este lunes un acuerdo alcanzado por su formación con la Unión Cristiano Demócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel sobre política migratoria que previsiblemente cerrará la actual crisis abierta entre las dos formaciones integradas en la 'gran coalición' del Gobierno alemán.
"Hemos alcanzado una solución sostenible (...), un acuerdo claro entre dos partidos conservadores", ha anunciado Seehofer tras un largo encuentro entre representantes de las dos formaciones. En concreto, el acuerdo incluye "una solución clara para atajar la inmigración ilegal en la frontera austro-alemana", ha apuntado.
El pacto prevé además la continuidad del propio Seehofer al frente de Interior a pesar de que había ofrecido en la noche del domingo su dimisión a la dirección de la CSU. "Voy a seguir siendo ministro del Interior", ha subrayado.
LOS DETALLES DEL ACUERDO
El acuerdo prevé la creación de "centros de tránsito" desde donde serán devueltos los extranjeros, ha explicado Merkel, lo que previsiblemente supone su internamiento y deportación forzosa. La secretaria general de CDU, Annegret Kramp-Karrenbauer, ha especificado que el acuerdo prevé que cualquier inmigrante que pretenda entrar en Alemania sea rechazado en la frontera si previamente se ha registrado en otro país.
Estos "centros de tránsito" serían edificios cerrados, de los que los migrantes no podrían salir mientras se resuelve su expediente y se decide si pueden permanecer en Alemania. Estos centros serían además responsables de llevar a cabo las expulsiones de los migrantes desde Alemania a los países europeos por los que entraron en Europa, han explicado fuentes citadas por la agencia de noticias alemana DPA.
Este acuerdo sería aceptable para CDU y CSU y evitaría tanto la dimisión de Seehofer, como una profunda crisis de un Gobierno que ha comenzado a dirigir Alemania hace poco más de 100 días.
El ministro del Interior y líder de la CSU, Horst Seehofer, había planteado la posibilidad de presentar su dimisión durante una reunión a puerta cerrada de la CSU debido al enfrentamiento que su formación mantiene con Angel Merkel en relación a la política migratoria del país.
Este mismo domingo, Seehofer tildó de insuficientes los resultados del acuerdo migratorio obtenidos por la canciller en el marco del encuentro con sus homólogos de la Unión Europea en Bruselas. En este sentido, el presidente de la CSU habría rechazado la propuesta de la canciller alemana de trasladar a centros en suelo alemán a los solicitantes de asilo que llegan al país tras ser registrados anteriormente en otros países.
Merkel y Seehofer se habían reunido el sábado a puerta cerrada en un intento de suavizar las diferencias. Según señala el 'Bild am Sonntag', ambos parecían aliviados al abandonar la cancillería tras el encuentro.
Sin la CSU, la coalición de Merkel -que integran la CDU, la CSU y el Partido Socialdemócrata o SPD- perdería su mayoría parlamentaria. En los medios alemanes se especulaba sobre si la jefa de Gobierno continuaría al mando de un Ejecutivo en minoría, si buscaría un nuevo aliado o si, por el contrario, allanaría el camino para la convocatoria de elecciones.
El ministro de Economía alemán, Peter Altmaier, ha asegurado que la formación "ha hecho todo lo posible para construir puentes" con la CSU.
