Ana Pastor fija el inicio de la investidura de Rajoy a las 16 horas del día 30 de agosto

"He tomado la decisión de que empezara a las cuatro de la tarde pensando en que cada grupo pueda tener tiempo para analizar las propuestas"

El PP ha 'copiado' así el esquema que eligió el PSOE en la pasada legislatura para fijar el horario de la investidura a la que se presentó Pedro Sánchez, que fracasó en su intento de lograr la confianza del Congreso para convertirse en el nuevo inquilino de La Moncloa. Los 'populares' lo hacen después de haber criticado a los socialistas por ello, aunque Pastor ha tratado de restar importancia a este hecho.

"He tomado la decisión de que empezara a las cuatro de la tarde tras analizar los pros y los contras, y pensando en que cada grupo pueda tener tiempo para analizar las propuestas", ha explicado Pastor, que ha dicho que el primer día sólo intervendrá Rajoy, por lo que la réplica del resto de partidos será el 31 de agosto, en la sesión que se iniciará a las 9 horas, de mayor a menor representatividad salvo el Grupo Popular, que lo hará en último lugar. La votación no se celebrará hasta última hora de la tarde del miércoles.

Micaela Navarro, presidenta del PSOE, ha dicho en comparecencia en el Congreso tras Pastor que su grupo tiene un "respeto absoluto" por la decisión de la presidenta de la Cámara baja sobre la hora del debate de investidura, aunque dice que están "sorprendidos" por la "incoherencia" que muestra el PP, que en la pasada legislatura presentó incluso un escrito en la Mesa del Congreso para que se cambiase la hora de la comparecencia de Sánchez que había fijado Patxi López. El PP entendía que se estaba reservando un día para la 'propaganda' del candidato socialista, e incluso el portavoz de los 'populares' en la Cámara baja, Rafael Hernando, llegó a decir que se estaba propiciando que hubiese un "monólogo" de Sánchez y habló de "caciquismo" y "falta de respeto".

EL MODELO TRADICIONAL

Hay que recordar que en los últimos días tanto desde la presidencia del Congreso como desde el PP se venía diciendo que la idea para la investidura de Rajoy era volver al modelo tradicional, aunque finalmente no ha sido así. En otras ocasiones, la sesión de investidura empezaba el primer día por la mañana, en torno a las 12 horas, y ya por la tarde intervenían todos los grupos de la oposición. Y el siguiente día por la mañana se celebraba la votación.

Ahora el debate será distinto, como ocurrió con Sánchez el pasado mes de marzo. Según ha explicado el Congreso en la nota que ha remitido para anunciar la decisión de Pastor, Rajoy expondrá el día 30 de agosto el programa del Gobierno que pretende formar y solicitará al Congreso la confianza para poder hacerlo. Finalizada la intervención de Rajoy la sesión se suspenderá y se reanudará el miércoles, "cuando tomarán la la palabra los representantes de los distintos grupos parlamentarios para plantear su posición, durante un máximo de 30 minutos".

En la primera votación Rajoy necesitará mayoría absoluta (176 diputados) y en la segunda sólo mayoría simple (más 'síes' que 'noes')

Rajoy tendrá oportunidad de responderles, algo que podrá hacer del modo que prefiera, bien uno por uno o de forma agrupada y de una sola vez. "La segunda intervención de los grupos parlamentarios será, de acuerdo con los tiempos reglamentarios, de 10 minutos", y una vez acabado el debate se realizará la primera votación, de forma "pública por llamamiento". Es decir, se nombrará a los diputados uno a uno, por orden alfabético a partir de una letra elegida al azar, para que en voz alta digan 'Sí', 'No' o 'Abstención' a la investidura.

En esta primera votación Rajoy necesitará el apoyo de la mayoría absoluta de la Cámara, 176 diputados, para ser elegido presidente del Gobierno. Algo que no conseguirá, por lo que habrá de someterse a una segunda votación pasadas 48 horas. Será el día 2 de septiembre, y en esta ocasión el candidato tendrá diez minutos para pedir el respaldo de la Cámara y los representantes de los grupos parlamentarios dispondrán de cinco minutos. En la votación Rajoy sólo requerirá mayoría simple, más 'síes' que 'noes' para ser investido.